Por Reynaldo Cruz
A pesar de que desde el Clásico Mundial de Béisbol de 2006 la confección del equipo Cuba y el posterior anuncio de la nómina son manejadas por la Federación Cubana de Béisbol como alto secreto de estado en vistas a cualquier torneo, ninguna nómina ha estado más cargada de intriga y polémica como la que se anunciará en próximos días con vistas a la justa de 2023. La presencia de peloteros en rosters activos de la Major League Baseball en la misma ha sido uno de los elementos de más peso para superar en misterio a todos sus predecesores.
Y en esta ocasión específica, la periodista Iris de la Cruz Saborit, del rotativo Granma, se acercó al Estadio Latinoamericano para conversar con el manager Armando Johnson y parte de su cuerpo de dirección.
En la entrevista, Johnson explicó que «no tenemos exactitud de cuál será la base del equipo. Hay un grupo allá y otro aquí, y todavía faltan cosas por hacer. Estamos centrados en el trabajo. La comisión lo ha hecho muy bien, y el Inder en general, y creo que ese esfuerzo al final nos va a dar frutos. Después, si pasa cualquier cosa, nosotros sabremos arreglar en el camino todo lo que pueda suceder».
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Surge claramente la incertidumbre de los peloteros que están en la MLB, que no están 100% confirmados para el conjunto (tal vez a excepción de Andy Ibáñez, quien mantiene comunicación con él), toda vez que varios peloteros de grandes ligas se han visto obligados a declinar una vez que dijeron que sí debido a lesiones o sencillamente restricciones impuestas a ellos por sus clubes de MLB, que son quienes pagan sus salarios y hacia los cuales les atan obligaciones contractuales. El caso de Luis Robert, que misteriosamente «eliminó» a Yasmany Tomás de la preselección, es el más preocupante de todos, pues no logró jugar 100 partidos en ninguna de las dos últimas campañas, y este es un asunto que los White Sox están siguiendo de seguro bien de cerca.
Anteriormente, el timonel había señalado que «quisiéramos tener el grupo completo, los atletas que hemos visto están enfocados en la meta de, por lo menos, pasar la primera fase. Vamos enfocados en esa primera vuelta. Creo que el grupo trabaja muy bien. En este periodo ya se ha visto que los atletas de nombre han estado incorporándose y no llegaron en cero, llegaron en una forma bastante buena para la etapa en la que estamos».
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Definitivamente, meta tiene que ser obligatoriamente esa primera ronda, pues mucho ha llovido desde el certamen de 2017, donde Cuba quedó eliminada por una paliza escandalosa ante Holanda en la segunda ronda. En la primera vuelta, el panorama se torna bien complejo para los cubanos, pues en el Grupo A, que jugará en Taichung, Taiwan, se las tendrán que ver con los anfitriones, Holanda, Italia y Panamá. Aunque Taipéi y Panamá parecen más rivales de menos cuidado, el poco talento que permanece en Cuba los deja muy vulnerables.
Respecto a la forma de los jugadores, sigue preocupando la falta de profesionalidad de los atletas cubanos, pues el médico del equipo, Francisco Montesinos, declaró: «excepto uno o dos con sobrepeso, por el tiempo que han estado descansando, el resto de los atletas se encuentra muy bien». Este es un problema recurrente hacia el inicio de cada Serie Nacional y a veces de cara a los torneos internacionales. De hecho, nadie de MLB llega a un entrenamiento de primavera a perder peso, pues es tiempo valioso que se pierde en el que perfectamente podría estar trabajándose en las dificultades técnicas que luego aparecen en las competencias.
