Conor McGregor es un peleador histórico en la UFC. El irlandés cambió la concepción de ver la disciplina y la dotó de más espectacularidad, lo que lo hizo ser un verdadero ídolo. Sin embargo, el atleta está pasando por momentos complicados que han minado su paciencia.
Nuestro protagonista tuvo su última aparición en el octágono en la fecha del 10 de julio del año 2021 ante Dustin Poirier. En aquel entonces, ocurrió un hecho que impactó a todos, ya que Conor sufrió una grave lesión que lo apartó por un largo tiempo de los octágonos.
Sin embargo, el deportista se recuperó de su padecimiento y deseó volver al escenario competitivo. Las ansias del fenomenal gladiador se vieron frenadas por varias razones, lo que comenzó a molestar al excampeón.
Una de las principales dificultades en esta historia es la relacionada con las pruebas de sustancias prohibidas, pues Conor McGregor no se realiza un test de este tipo desde hace bastante tiempo, ya que salió de esta rutina en el momento de su fractura de tibia.
El público confió en que el retorno sería rápido, pero para nada fue así. El mes de diciembre del año 2023 se visualizó como un plazo posible para hacer realidad un nuevo combate, lo que resultó en falsas expectativas.
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La impaciencia de Conor McGregor
Conor McGregor se desesperó ante esta pausa que parece ser eterna. The Notorious ofreció declaraciones a The Mac Life, que pueden ser disfrutadas en el canal de Youtube del referido sitio. Las palabras del irlandés mostraron navegar en el pesimismo, al observar tantas puertas cerradas.
“No dejé de entrenar, siempre estoy entrenando, pero he dejado de entrenar al máximo y he empezado a beb*r un poco. Así que, voy a volver, me reagruparé, me haré todas las pruebas y estaré listo para brillar”, confesó quien ostentó las coronas universales de los pesos pluma y ligero de manera simultánea.
McGregor es una figura infaltable en la trayectoria de este fenomenal deporte. La foja de 22 éxitos y apenas seis tropiezos son estadísticas de admirar. No obstante, un pregunta se impone: ¿Podrá el atleta mostrar esa forma deportiva que tuvo antes de su combate ante Poirier?
Las especulaciones son muchas. Por lo tanto, esperemos que el luchador pueda subir nuevamente al recinto de combate. El tiempo pasa y ese es cruel e implacable con todos, por lo que cada mes que pase en vano es un látigo en los suelos del as.
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