Por José Alejandro Rodríguez Zas
En los últimos años, el cubano Marcel Hernández, ha sido uno de los delanteros más destacados de la Primera División del campeonato costarricense de fútbol. Llegó al país centroamericano en el año 2018 con el club Cartaginés y desde el primer momento demostró que no sería un extranjero más, sino un referente goleador en la liga, lo cual intenta demostrar con su actual equipo Alajuelense.
Luego de salir de Cuba, Marcel se convirtió en un futbolista profesional a los 25 años y trató de abrirse paso en campeonatos de Antigua y Barbuda y República Dominicana, pero el destino se encargó de colocarlo en el fútbol de Costa Rica. De hecho, su calidad es tal, que ha recibido varias ofertas de clubes de Europa, Asia, Estados Unidos y México, pero por distintas cuestiones no se han podido materializar en contratos.
Su punto más elevado llegó en 2020, cuando anotó 31 goles en 40 partidos, sin lanzar penales, convirtiéndose en el tercer máximo goleador en todo el mundo del balompié, sólo por detrás de Cristiano Ronaldo y Robert Lewandowski.
El delantero de 31 años, quien anotó un total de ocho goles con la selección cubana en torneos internacionales celebrados entre 2010 y 2013, fue marginado de integrar equipos nacionales por haber decidido emigrar del país, debido a la obsoleta postura de los directivos cubanos al respecto, lo cual se extiende a todos los deportes. De hecho, Marcel expresó en alguna oportunidad que nunca más representaría a Cuba, al no ser incluido en la convocatoria a la Copa de Oro de la Concacaf en 2013.
Sin embargo, dada la suerte de apertura que se ha evidenciado en Cuba en este particular, especialmente en el futbol, Marcel ha vuelto a convertirse en una opción para defender los colores de la selección nacional en compromisos internacionales, con lo cual, al parecer, está de acuerdo el jugador. Sin embargo, nunca se ha podido materializar su presencia en el conjunto y los motivos reales de la ausencia de Marcel nunca han quedado del todo claros.
Según publicó hace unos días la prensa deportiva costarricense, a través de “Costa Rica Medios”, Marcel no se incorporó a la convocatoria de la selección cubana para los partidos eliminatorios efectuados a finales de marzo pasado, rumbo a la Copa del Mundo de Catar 2022, por desacuerdos existentes entre el futbolista y la Federación Cubana.
“El cubano Marcel Hernández sí fue convocado por su país para el arranque de la eliminatoria (…), sin embargo (…) un par de condiciones que solicitó el ariete no fueron cumplidas a satisfacción y declinó de tener esa opción”, indica la nota citada.
Al respecto, el propio representante de Marcel, Ernaldo García, explicó que “básicamente se sintieron en desconfianza después de una primera carta enviada por la Federación Cubana que ni siquiera fue firmada por los jerarcas de la federación y condiciones en términos de viáticos en donde ofrecían al jugador entre 30 y 200 dólares.”
“Marcel solicitó entre 100 y 200 (dólares), cosa que no fue ratificada. A eso se sumó que debía operarse rápido, ya que el pasaporte de Marcel está vencido y retenido por la justicia tica a fin de que se resuelva el problema legal que tiene actualmente, este pasaporte debía tener casi que un protocolo diplomático para solicitar permiso para salir del país a jugar ese partido y regresar”, detalló el representante del futbolista.
La nota de “Costa Rica Medios” indica además que “sobre la concentración del equipo cubano se afirmó en una segunda carta que estarían en un hotel 5 estrellas, cosa que Marcel también había solicitado, pero, aunque esta sí venía firmada, no traía los cambios especificados en cuanto a los viáticos ya descritos.”
Evidentemente, esas peticiones del futbolista no fueron bien recibidas por las autoridades del fútbol cubano y resultaron en un desacuerdo entre ambas partes, impidiendo a los seguidores de la selección tricolor antillana de disfrutar el juego alegre de Marcel con el uniforme de las cuatro letras. Y si, eso es cierto, discrepancias aparte, siempre los aficionados somos los que más sufrimos.
Es una realidad que ni los directivos cubanos ni la prensa oficialista se harán eco de este asunto, ni tampoco explicarán los detalles ocurridos o su versión de la historia, debido al conocido secretismo que se maneja en todas las esferas de la vida en Cuba.
Sin embargo, haciendo memoria, el pasado día 9 de marzo, una publicación del diario digital “Jit” anunciaba los integrantes de la selección que asistiría a los partidos eliminatorios y sobre la no convocatoria del internacional Marcel Hernández, el jefe técnico de la comisión cubana de fútbol, Miguel Ángel Díaz, explicó entonces que “lo impidió una serie de particularidades sobre las cuales no pretendían profundizar en ese momento” y aclaró “que continúan los diálogos con el atleta y esperan contar con sus servicios para próximos compromisos”.
Ese mismo día, el portal cubano Prensa Latina, explicó que “destaca la ausencia en la nómina del goleador de liga costarricense, Marcel Hernández, cuyos motivos no fueron aclarados por los directivos de la AFC, aunque diversas fuentes apuntan a problemas con sus documentos legales”
Y entonces, amigo lector, ¿qué piensa usted de toda esta novela? ¿Son excesivas las exigencias de Marcel para jugar con el equipo Cuba? ¿Debe la federación cubana seguir negociando u olvidarse del futbolista? Esperemos que, de algún modo, la verdad salga a relucir.
