Por Alexander García Milián
¿Escarnio?, ¿Purga?, ¿Qué pasa con la cortadera de cabezas que viene andando en la pelota cubana? Eduardo Paret es otro de los condenados.
Las preguntas machacan con todo el peso de su dimensión sociológica y hasta psicológica diría; pues lo acontecido con las salidas abruptas de varios directores de equipos en la Serie Nacional aún nos deja atónitos y ahora mismo el caso de Eduardo Paret le pone la guinda al pastel.
Los rumores de un posible contrato de Paret en una Academia de Béisbol en Miami tomaron connotación y tras salir publicadas varias fotos del mentor en las instalaciones,- ¡Bombazo!, ¡Paret afuera!- sí, para afuera y sin explicaciones, nada importo el segundo lugar obtenido en su primera temporada como mentor, a priori se escudaron de sus malos resultados en esta Serie 59 y lo machacaron no más.
El asunto ha comenzado a sonar y tras varias declaraciones de Paret, la afición puede palpar que de especulaciones la clase dominante no puede vivir y ante la duda… ¡Fuera!, más si ahora con consulta incluida- lo que sobre se va, solo los tipos de confianza quedan.
En un contexto de purgas, quizás a lo Stalin, en un contexto así, como no ir sobre Eduardo Paret si ya a mediados de los 90 fue uno de los señalados por supuestos vínculos con Jorge Luis Toca y otros villaclareños que habían salido de Cuba- incluso el mismo Pedro Jova fue puesta en capilla ardiente- ¿Cómo no iba a ser Paret?
La interrogante parece quedar en el aire y si a Víctor Mesa que parecía ser el protegido de la élite le rayaron la tarjeta por aparecer junto a Orlando “el Duque” Hernández en un programa de televisión en Estados Unidos, que podría quedar para Eduardo.
El ambiente es incierto en la Isla, ya le pasaron la cuenta a un hombre como Noelvis Gonzalez- un tipo de pico suelto- según suenan comentarios por ahí, de pico suelto porque no se callaba nada, protestaba todo. De igual modo sacaron de juego a otro que no andaba con paños tibios, José Raúl Delgado… cuando el Partido traza las pautas, solo los hombres de confianza deben asumir y tal parece que estamos en La carretera de Volokolamsk o que todo se vuelve El archipiélago Gulag; la politización es inmunda y el deporte no escapa… ¿ alguien lo duda?
En este punto, la figura de Paret se vuelve un estorbo en todas sus líneas, más cuando un preferido de las elites, Ariel Pestano anda por ahí, tras bambalinas esperando su turno.
Las casualidades quedan relegadas a un segundo plano, miren a Sanctis Spiritus, Eriel Sánchez ya asumió jalones, entonces… ¿alguien esta escéptico respecto a Pestano?
El tema da tela para cortar y más cuando el oficialismo está regando la bola de la posible salida definitiva de Eduardo hacia Miami; es así… ellos no pierden ni a las escupías.
Nos vemos a la vuelta.
