Por Juan Páez
Este 2019 se muestra como un año explosivo para el poder cubano en las Grandes Ligas, pero hay un caso que es tan extraordinario como reciente: la fuerza y la capacidad de sacar la bola que evidencian los hermanos Gurriel. Tanto Yulieski como Lourdes, se vuelan la barda con una frecuencia tremenda en las últimas jornadas de la Gran Carpa.
De hecho, no hay apellido en las Mayores con tantos estacazos de vuelta completa desde el 18 de junio como el Gurriel.
Los hermanos nacidos en Sancti Spiritus acumulan nueve bombazos cada uno desde la fecha citada, uno más que Mike Trout, Matt Olson y Josh Bell.
A estas alturas, “Yunito” ya suma 16 pelotas fuera del parque y lidera a los Azulejos de Toronto en ese departamento, mientras que su hermano mayor registra 14 vuelacercas y es uno de los tres miembros de los Astros de Houston con al menos esa cantidad, junto con George Springer y Alex Bregman.
El poder del “Yuli”
Para el “Yuli”, la avalancha de jonrones no llegó sola; lo hizo acompañada de historia. En la jornada de este domingo, Gurriel pegó un Grand Slam para llegar a cinco juegos seguidos con, como mínimo, un bambinazo. Esa es la segunda racha más larga en la historia para un cubano, empatada con las dos de José Canseco (1995 y 1999) y solo por debajo de la que consiguió Kendrys Morales el año pasado.
Si el infielder de los siderales abre la segunda parte de la temporada con una larga conexión, igualará la cadena más extensa en la historia de ese club, en poder de Morgan Ensberg, quien logró seis encuentros consecutivos en 2006. Actualmente, Yulieski comparte el segundo lugar con José Altuve, Carlos Beltrán y Cliff Johnson.
El veterano de 35 años también llegó siete duelos al hilo con empujada, la hilera más grande de su trayectoria, y a 11 compromisos dando de hit, la tercera mayor racha. A este paso, no debería tener problemas para establecer un nuevo tope personal en jonrones, pues su proyección es de 25 para el final de la ronda regular, número que superaría de manera notable los 18 que totalizó en 2017.
El menor en alza
Difícilmente ha habido un bateador más encendido que Lourdes Gurriel Jr. desde que lo volvieron a subir desde ligas menores (24 de mayo). Desde ese momento es quinto en las Grandes Ligas en hits (52), segundo en cuadrangulares (16), décimo en impulsadas (30), tercero en anotadas (34) y décimo en average (.335).
Lo mejor de todo es que su poder va en aumento. Luego de batear 11 jonrones en 65 juegos en el torneo anterior, ahora no solo acumula más vuelacercas en menos desafíos (16 en 53 cotejos), sino que los cálculos sugieren que terminará la etapa eliminatoria con 28 bombazos.
Pero si apura el paso y llega a los 30 bambinazos en 2019, se convertirá en apenas el cuarto cubano en la historia con tres decenas de pelotas fuera del parque en al menos una de sus primeras dos zafras en la Gran Carpa. Hasta ahora, ese hito solo lo lograron José Abreu (2), José Canseco y Yasmany Tomás.
