En el 2022, Yasmani Grandal fue el cubano mejor pagado en las Grandes Ligas, con un sueldo de 18.25 millones de dólares. Sin embargo, su alto salario no estuvo en consonancia con su pobre desempeño.
Para Grandal, el año pasado quedó bien atrás. Tras una gran preparación física con Paul Goodman, el coach de acondicionamiento físico del Chicago Blackhawks (hockey), está listo para entrarle con todo a la nueva temporada.
“Lo que hicimos en la temporada muerta es exactamente lo que necesitaba. Se nota la diferencia de inmediato, tanto atrapando y moviéndome como bateando y corriendo”, dijo Yasmani Grandal, quien entrenó los siete días de la semana durante gran parte del offseason. “No tienes los dolores, las molestias, nada de eso”.
El nuevo mánager de los Medias Blancas, Pedro Grifol, admitió que no le gusta “apurarse” para decidir esas cosas. Sin embargo, se sabe que Grandal será, como se espera, el receptor titular de los patiblancos. Esto pese a que Chicago estuvo buscando a un reemplazo para Yasmani en algún punto del receso entre campañas.
El careta cubano, de 34 años de edad, viene de un año difícil en el que solo participó en 99 juegos y bateó para promedios de .202/.301/.269/.570, con cinco jonrones y 27 empujadas.
El 2023 será un año clave no solo para los Medias Blancas, sino también para Yasmani Grandal. Este es el último torneo del contrato firmado por cuatro campañas y 73 millones de dólares. Su misión será reivindicarse este año para entrar con buen estatus a la agencia libre.
“Voy a estar listo para jugar a diario. Igual cuando no juegue, me mantendré listo. El hecho de mantenerme fuerte y volver a estar ágil me va a permitir hacer muchas cosas detrás del plato: bloquear, recibir y lanzar, lo que sea que necesite hacer. Desde ese punto de vista, me siento realmente bien”, dijo.
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— Chicago White Sox (@whitesox) February 17, 2023
