Por Jesús Alaín Fernández
Faltan hoy 142 días para el arranque de la temporada 2022. Aun con toda la incertidumbre alrededor del vencimiento y negociación del convenio de trabajo entre la MLB y la Asociación de Jugadores (MLBPA) los preparativos para la nueva temporada van a toda máquina.
En el día de ayer, contrataciones, exhibición de jugadores y otros que optan por ir a la agencia libre en lugar de aceptar ofertas calificadas hicieron los titulares.
Acá te ofrecemos un rápido resumen de lo que debes saber.
Justin Verlander:
El lanzador derecho (38 años) que viene regresando de una cirugía Tommy John y que ha dicho ya que pretende lanzar hasta los 45 realizó un “showcase” en el Cressey Sports Performance. Solo un tip, la instalación floridana pertenece al Director de Salud y Desempeño de los Mulos del Bronx.
Según han reportado los asistentes al evento su velocidad estuvo entre las 94 y 97 mph, mostrando un potencial a lo novato de 20 años en su brazo y forma física. Entre 15 y 20 scouts de organizaciones estuvieron y para muchos los más motivados fueron los enviados desde la Gran Manzana (Yankees) y Nueva Inglaterra (Medias Rojas).
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Verlander no lanza en la Gran Carpa desde el 2019 y su objetivo es regresar al ruedo con alfombra roja incluida.
Corey Seager:
El ya extorpedero de los Dodgers de los Ángeles había recibido en la última jornada para la presentación de ofertas calificadas la suya propia. El jugador de 27 años de edad obtuvo la propuesta de la organización con la que nació y creció en la MLB para un año y 18.4 millones de dólares.
Como se esperaba, ni corto ni perezoso, Corey desestimó el ofrecimiento e incursionará en la agencia libre por primera vez en su carrera. Se estima que el jugador pueda estar buscando un contrato que pase de los 7 años y 30 millones como promedio por temporada.
Seager, como ficha adicional en este mercado, podría estar cambiando de posición hacia la antesala. Su promedio de .306 con 16 jonrones y 57 RBIs en la temporada 2021, aun cuando perdió un tramo por una fractura en una mano, lo colocan entre los agentes libres más importantes de todo el circuito.
Marcus Siemen:
Marcus también pasó página con los Azulejos de Toronto. El jugador, actualmente entre los tres candidatos a MVP de la Liga Nacional, le dijo que no a la oferta calificada. 18.4 millones quizás sean poco más de la mitad de lo que el ganador del Guante de Oro en la intermedia y fabricante del récord de jonrones para un jugador de esa posición (45) en la historia de la MLB pueda aspirar.
El también extorpedero de los Atléticos de Oakland en el 2019 probó, gracias a la existencia de un Bo Bichettte en el campocorto canadiense, su versatilidad y calidad defensiva fuera de su agua natural.
Andrew Heany:
Los Dodgers de los Ángeles movieron ficha temprano. Se anunció la contratación del lanzador abridor zurdo Andrew Heany, proveniente de los Mulos del Bronx, por una temporada y 8.5 millones de dólares, pendiente de revisión física.
Su tocayo, Andrew Friedman, había dejado clara la prioridad para el invierno y aun cuando los números generales de Heany (5.83 de efectividad con 8-9 en 23 aperturas) lo ubican lejos de la cima entre las alternativas en el mercado no se puede desestimar el efecto Mark Prior en los lanzadores que llegan a California casi en el punto de desecho y luego hacen su trabajo a diario.
150 ponches en 129 entradas y dos tercios ponen de relieve los recursos con que cuenta en lanzador zurdo de 31 años para moldear.
Cultura MLB (Oferta Calificada):
La oferta caliificada se extiende a un jugador por única vez en su carrera. Se calcula sobre la base de el promedio de los 120 contratos anuales mas grandes de la MLB. El jugador puede aceptarla o rechazarla e ir a la agencia libre.
De rechazarla el equipo que lo firma tendrá que compensar al equipo anterior con un puesto en el draft amateur de la temporada siguiente, cuya posición estará determinada por el valor del contrato firmado.
El objetivo de presentarla varía. Puede ser una transparente intención de hacerse de los servicios del jugador por una temporada más, ponerse en ventaja al negociar el nuevo contrato sobre el resto al no tener que ceder nada a cambio o obtener, ante una partida evidente, un puesto en el draft que permita obtener jugadores para el futuro de la organización.
