«Yo era de los MEJORES, pero NO me conocen en CUBA», CONFESÓ grandes ligas cubano

Por Migue Guerra

Estelares jugadores cubanos han pasado por la gran carpa, muchos de ellos han destacado por habilidades ofensivas, defensivas y otros por ser considerados peloteros completos al poseer las conocidas cinco herramientas.

Entre la gran lista de paisanos, destaca un pelotero que se caracterizó por su consistencia en la selección de lanzamientos y paciencia en el plato, aspectos que le permitían llegar a las bases con alta frecuencia, lo cual es muy valorado actualmente en los peloteros de grandes ligas; la estadística que refleja esta habilidad es conocida como On-base Percentage (OBP).

En esencia, el OBP es un promedio que refleja que tan frecuente un jugador se embasa por el método que sea, a excepción de errores, fielder choice, tercer strike no capturado, obstrucción o interferencia del receptor.

En 5315 turnos al bate, Escobar conectó 1501 hits, entre estas conexiones resaltaron 90 jonrones, además impulsó 519 carreras y anotó 689, mantuvo línea ofensiva .282/.350/.386 (AVG/OBP/SLG).

«Una vez me hablaron de cuando yo jugué con Metropolitanos. Me preguntaron cómo me había ido con el equipo, yo me insulté cuando esa pregunta me llegó, porque antes de hacer una pregunta a alguien hay que tener una base de datos, hay que saber con quién se está hablando, todo el mundo no es Tabares, todo el mundo no es Enriquito, Anglada, Javier Méndez, Padilla, Omar Linares o Pacheco».

«Entonces hay peloteros que no los conocen tanto en Cuba, como el caso mío que no me conocen en Cuba, que pensaron que mi carrera venía de aquí. Yo desde niño, desde que tenía diez años estaba en el equipo nacional de Cuba, el que me conoce sabe que yo no estaba inflando, que yo estaba entre los mejores de la capital, yo era “El Gambao” en Marianao, en La Habana entera y en Cuba entera».

«El que me conoce sabe que yo no vengo a comerme la merienda, cuando yo subía a la guagua todo el que jugaba conmigo tenía que jugar pelota, ellos saben que yo calentaba el local donde quiera que llegaba. La guerra mía era con todo el mundo, hasta con los mismos peloteros de mi equipo, tenían que jugar».

«Desde los diez años estuve en los equipos nacionales de 10 – 11, 11 – 12, 13 – 14, 15 – 16, juvenil; fui al mundial juvenil, a juegos de estrellas, fui campeón de bateo. Me tocó jugar con los Industriales, pero ¿quién iba a tumbar a Vargas o a Germán?»

«Después del tiempo de Padilla vine yo, pero nunca había jugado segunda base. Realmente la carrera mía no viene de aquí, mi carrera viene de Cuba».

«Yo vengo con Brayan Peña, siempre le agradecí, él es prácticamente un año mayor que yo, él me recogía en la escuela y me llevaba a la Ciudad Libertad donde practicaban con el entrenador Perdigón, día por día. Mi abuelo me llevaba siempre a la escuela».

«Yo era muy unido con Brayan Peña desde niño, cuando Brayan deserta yo era su compañero de cuarto y la seguridad del estado cubano empieza decir que yo sabía que Brayan Peña se había ido. Yo en lo personal ni sabía que cosa era quedarme ni nada de eso, hasta yo cogí susto. A partir de ahí me empezaron a tronchar un poco el camino porque pensaban que yo me iba a ir luego».

Nos gustaría conocer su opinión sobre las palabras de Yunel Escobar, no olvide escribir todas sus ideas en la caja de comentarios.

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