SE EXCEDIÓ José Miguel, GRAN DEBUT de Yariel, JOYA de Odrisamer. Cubanos en Asia

Por Juan Páez

En el Jamsil Baseball Stadium, de Corea, hubo un festival de batazos y José Miguel Fernández fue uno de los protagonistas principales. En la jornada de este jueves de la Organización Coreana de Béisbol (KBO, sus siglas en inglés), en la derrota del Doosan Bears 14×13 contra el Kiwoom Heroes, el cubano brilló a la ofensiva con jonrón y cinco impulsadas incluidos.

En total, Fernández ligó de 4-3, con par de sencillos, su sexto cuadrangular de la temporada y el quinteto de fabricadas (para llegar a 21), una anotada, una base por bolas y un elevado de sacrificio. Su línea ofensiva quedó en .333/.396/.508 luego de esta actuación, que le permite registrar 10 producidas en sus últimos seis compromisos.

A estas alturas, el habilidoso bateador cubano suma 44 hits, cinco dobles y los seis mencionados vuelacercas. También las 21 empujadas, 27 anotadas, 15 pasaportes y solo 10 abanicados, además de un OPS de .904. En sus 32 encuentros totales, acumula 14 desafíos con dos o más indiscutibles.

El que no contó con la mejor de las suertes fue Odrisamer Despaigne, que se llevó la derrota en la caída del KT Wiz 4×0 ante el Samsung Lions. El Despa lanzó 6.0 episodios de apenas dos hits y una carrera limpia, pero no contó con el respaldo ofensivo de su club. Dio cuatro boletos y retiró a cinco contrarios por la vía del ponche.

El récord y la efectividad del derecho antillano quedaron en 3-3 y 2.08, respectivamente. En siete de ocho aperturas totales en la temporada 2021, permitió dos o menos carreras limpias. De hecho, en cinco inicios corridos concedió una o ninguna rayita merecida.

Pa Japón

Aunque en el Béisbol Profesional Nipón (NPB, sus siglas en inglés) hubo poca acción, hubo destacada participación cubana. En el revés sufrido por el Chunichi Dragons 2×1 frente al Hanshin Tigers, Yariel Rodríguez fue el abridor del Chunichi y, aunque se fue sin decisión, tuvo una sólida presentación.

El antillano tiró 6.2 entradas, en las que permitió siete inatrapables y una carrera limpia, con tres bases por bolas e igual número de ponches. De esta manera, disminuyó su efectividad a 1.35. Su compañero Dayán Viciedo se fue de 4-1, con sencillo, para dejar su promedio con el madero en .273.

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