Por Yasel Porto
El cubano Yulieski Gurriel envió la pelota más allá de los límites del Minute Maid Park en el cierre del sexto para poner delante a los Houston Astros en el juego 1 de la Serie de Campeonato de la Liga Americana contra los New York Yankees.
El estelar primera base volvió a pegarle bien a la bola por su mano como en su turno anterior, pero en esta ocasión ni Stanton ni nadie pudieron quitarle la celebración.
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El batazo sirvió para poner delante a los Astros 2×1 con el relevista de New York Clarke Schmidt, el segundo de Gurriel en esta postemporada y su octavo de por vida en esta instancia (cuatro contra slider como el de ahora). Su jonrón anterior en estos playoff, contra Seattle, también aconteció frente a ese tipo de lanzamiento.
Es quinto de por vida dentro de la franquicia, empatado ahora con Carlos Beltrán. El primero es el venezolano José Altuve (23) y luego le siguen George Springer (19), Carlos Correa (18) y Alex Bregman (13).
Y con respecto al entorno cubano, este cuatroesquinazos le permitió romper el abrazo con José Canseco en el segundo puesto. Ahora está a tres del pinareño Randy Arozarena.
El jugador de 38 años de edad se ha encendido en estos playoff, lo cual ha servido para igualar o romper récord entre cubanos. Uno de ellos es el de hit que cada día aumenta sus cifras. En 2017 y 2019 también había pegado par de bambinazos en toda una postemporada, por lo que un tercer batazo de esta categoría resultaría récord personal.
Los Astros ampliarían poco después en ese mismo quinto inning por otro tablazo salido del bate del jardinero central Chad McCormick.