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Una vez más, el saltador cubano Juan Miguel Echevarría tuvo muchas miradas encima en la jornada del 2 de julio, debido a la posibilidad que se presentó para obtener el boleto directo al Campeonato Mundial del deporte. El Meeting Atlético Memorial José Luis Hernández en Pamplona pareció ser el escenario perfecto para la consecución de dicho objetivo, pero el deportista no logró vulnerar la barrera de los 8.27 metros, que es el límite situado para obtener el ansiado pasaje. A pesar de esto, el camagüeyano reinó y sus adversarios nunca representaron un riesgo real.
La competición resultó tediosa para el antillano desde el punto de vista técnico. Una y otra vez, la carrera de impulso y el despegue fallaron y los fouls aparecieron. Este aspecto pareció saldado en anteriores eventos, pero las falencias volvieron. Juan Miguel Echevarría solo tuvo una ejecución válida, que ocurrió en su tercer intento, en la que firmó 8.03 metros.
Errores constantes
Los cambios en medio del fragor competitivo no cumplieron con su propósito y la tabla de despegue se convirtió en indomable para el campeón mundial bajo techo. Los saltos restantes siguieron la misma rutina y no hubo una respuesta eficaz que contrarrestara el problema.
En otras ocasiones en que el fenómeno apareció las acciones surtieron efecto, pero en el Meeting Atlético Memorial José Luis Hernández en Pamplona no fue así. Aunque realmente no estaba en juego una presea universal o un resultado extraordinario, resultó curioso (cuando menos) que no existió un antídoto para vencer el percance.
Los demás competidores se liaron en una batalla sin cuartel, en la cual Héctor Santos Llorente e Iker Arotzena Indo sacaron el mejor provecho. El primero de ellos ocupó el subliderato gracias a un registro de 7.57 metros, mientras Indo ancló en la tercera plaza con 7.35 metros.
Otro éxito para Juan Miguel Echevarría
A pesar de los inconvenientes, Juan Miguel Echevarría sumó su cuarto evento de manera consecutiva con marcas por encima de los ocho metros, lo que siempre es un punto favorable a destacar. El camagüeyano posee como tope esta temporada dos resultados de 8.24 metros, en actuaciones que lo pusieron una vez más en la vanguardia de la disciplina.
El meeting en Pamplona se asemejó al momento cumbre en el cual «Black Panter» podía volar más allá de los 8.27 metros y garantizar su presencia en la justa universal que se llevará a cabo el venidero mes de septiembre. Aún existe la opción por la clasificación por puntos del ranking mundial, pero el saltador cubano no quiere dejar margen a las dudas.
Otras confrontaciones se harán realidad y el trayecto es largo. Esta vez no pudo ser, aunque la victoria en la lid emparejó la balanza en cuanto a sensaciones.