Muchos recordamos aquel equipo de Cienfuegos de los años 2008, 2009, 2010. Eran una escuadra difícil, de las mejores que ha tenido esa provincia en la historia reciente del beisbol cubano. Cuando pensamos en el conjunto, saltan de la memoria otros nombres como: Jose Abreu, Adir Ferrán, Osvaldo Vázquez, Erisbel Arruebarruena, Norberto González, Duniel Ibarra y su antesalista Pavel Quesada.
Pavel Quesada debutó en Series Nacionales con solo 16 años en la temporada 2004-2005. Sin embargo, no fue hasta la 2006-2007 que llegó a afianzarse en el equipo de la región central de Cuba. Luego de varios años con los Elefantes, en 2014 interrumpió su estancia en Cuba e incursionó en LIDOM con Águilas Cibaeñas donde no le fue bien, aunque vale mencionar que jugó poco. Regresó con su amado Cienfuegos en la 2018-2019 con gran rendimiento. Durante 12 Series Nacionales bateó para un excelente .313/.419/.468, despachó 73 jonrones y empujó 423 carreras.
Pavel Quesada: «Extrañaré tanto jugar como a la familia que dejo en Cuba»
Este 30 de diciembre, Pavel Quesada hizo pública su llegada a México y sus planes de residir en esa nación por al menos un tiempo. Tras el arribo de la noticia, el cubano accedió a ofrecer una exclusiva a Swing Completo sobre su situación y su sentir.
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Primero dejó claro que no jugaría la próxima temporada en Cuba y de hecho, no piensa jugar más béisbol: «Tuve muchas desilusiones y no quiero seguir cargando con eso. Esta última Serie la jugué súper desmotivado. Gracias al apoyo del director Jorgito (Jorge Rodríguez) lo superé un poco, pero de verdad, con el dolor de mi alma, no jugaré más beisbol», explicó.
Tras ser cuestionado por las causas de esta desilusión, Pavel Quesada mencionó el no ser tomado en cuenta para equipos nacionales. «Esa fue una de las decepciones que me hicieron tomar esta decisión. Tuve un gran año la temporada pasada tanto en Serie Nacional como en Liga Élite y en los entrenamientos, y no me tomaron en cuenta para nada», afirmó.
En ambas competiciones, Pavel Quesada bateó para más de .330 con cinco vuelacercas y más de 40 y 20 impulsadas, respectivamente. Aún así, el jugador no señaló a nadie en la Isla. «No quiero achacarle mi decisión a nadie. Solo vi que no estaba bien eso y no quise perder más tiempo», continuó el cubano.
Asimismo, detalló que sus planes son realizar los trámites pertinentes para llegar a Estados Unidos y «comenzar un nuevo camino». Por último, agradeció la preocupación de todos los seguidores que de alguna forma u otra se han interesado por su situación: «Muchas gracias, de verdad. Extrañaré tanto jugar al beisbol como a la familia que dejo en Cuba».
