Por Yasel Porto
La legendaria figura del judo mundial Ronaldo Veitía lleva semanas en el centro de atención de muchos por el delicado estado de salud que afronta desde agosto último.
En los últimos días trascendió que se encuentra en su hogar del municipio habanero del Cotorro, con un estado de forma que se aleja de aquel carismático hombre que se convirtió en un símbolo del deporte cubano. Debido básicamente a haber sufrido un infarto cerebro-vascular mientras visitaba a su hijo Ihosvany en España.
Varios han sido los que se han ocupado de una u otra manera, y en ese grupo se incluye también un conocido y destacado exlanzador de Industriales y Metropolitanos.
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Se trata de René Espín Delgado, quien lanzó entre 1990 y 2005 con azules y rojos indistintamente, con quienes alcanzó buenos resultados a nivel nacional en varias ocasiones.
Incluso en el año 2000 concluyó como uno de los mejores de Cuba y eso lo llevó a la preselección para los Juegos Olímpicos de Sydney.
Fue esa misma campaña en la que le lanzó un partidazo a Industriales en aquel memorable playoff contra Metros (ganó 2×0 el juego 2), aunque tres años después sumó otro momento trascendente al cerrar el juego que coronó a Industriales por primera ocasión desde 1996.
Este martes el oriundo de Guanabacoa fue al hogar de Veitía con alimentos y algunos aditamentos necesarios para él y para su hija, quien se ocupa las 24 horas del día del laureado entrenador.
Me comentó el propio Espín cuánto le había impresionado la situación actual de Veitía. Tanto por hablar poco como por el hecho de no poder recordar mucho. Ni a las personas ni buena parte de su pasado. Eso lo conmovió enormemente con lágrimas incluidas.
«Salí llorando de ahí. Fui fan de él y verlo en esas condiciones físicas me conmovió de verdad porque no está bien de salud. Yo le dije a ellos que podían contar conmigo para lo que hiciera falta», me dijo el campeón con Industriales en las series 1995-96, 2002-03 y 2003-04.
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El pasado mes de octubre Veitía fue trasladado de España a Cuba por decisión personal. Fue ingresado inicialmente en el hospital Hermanos Ameijeiras y luego se tomó la decisión de continuar el tratamiento en su casa donde celebró su cumpleaños 75. El Instituto de Medicina Deportiva quedó con la responsabilidad médica de este caso según se informó públicamente.
De momento varios se han sumado a contribuir con él de una u otra forma como el caso referido con el exlanzador capitalino. Y seguramente que muchos otros se sumarán a ayudar a esta figura que se ganó el respeto y el cariño de muchísima gente, en el momento de su vida donde más lo necesita.
Hay que dar atención de excelencia a quien puso a nuestro país en un nivel de excelencia en el Judo femenino
Aunque es cierto q el calor familiar ayuda, en estos momentos por los que atraviesa Cuba ¿Con qué se puede mantener a una persona si lo que quiere es yogurt, jugo, papilla? En fin. No hay peor ciego q el que no quiere ver.
Yo creo q una institución neurológica hubiera sido más útil.
Sería bueno que a los q tratamos de ayudar no nos combatan sino que todos nos unamos en pos del bienestar del profe Veitia.
Debe ser doloroso ,para los q tuvieron el honor de conocerlo personalmente verlo en esa situación ,espero q se sigan sumando amigos ,y conocidos cercanos ,para paliar un poco su situación y ayuden a su hija q lo cuida ,Veitia junto al equipo femenino de judo , dió gloria y prestigio al deporte cubano, ojalá mejore y se le brinde la ayuda q se merece.