5 sinsabores para cubanos tras la temporada 2019 de Grandes Ligas

Por Juan Páez

Más allá de todo lo bueno que hubo en 2019 para los peloteros cubanos en las Grandes Ligas, con el final de la campaña llegó un racimo de sinsabores para cinco jugadores antillanos. Este grupo incluye un retiro quizás forzado, un despido e incluso un corte de salario.

Comencemos con la lista…

Un golpe al bolsillo de Yoenis Céspedes: en enero, los Mets de Nueva York anunciaron que enmendarían el contrato millonario de Yoenis Céspedes, con mayor peso para la venidera campaña de las Mayores. El slugger, quien no juega en el big show desde 2018 a causa de problemas físicos, pasó de tener asegurados 29.5 millones de dólares a solo cobrar seis millones fijos por 2020.

Sin embargo, no todo es malo para la Potencia. Podría ganar 14 millones más en incentivos y si no vuelve a la lista de lesionados por el mismo problema físico que le hizo perder porción de 2017 y 2018, además de todo el 2019.

Kendrys Morales dice adiós: lo que fue una de las carreras más respetables para pelotero cubano en los últimos años, finalizó luego de la zafra pasada. Kendrys fue despedido en julio 2019 por los Yankees de Nueva York y no volvió a encontrar trabajo en las Grandes Ligas.

En febrero de este año, el industrialista se despidió oficialmente del béisbol tras una carrera de 13 años en el big show con siete organizaciones. Dio 257 dobles, 213 jonrones y mil 289 hits totales. Su adiós marcó el final de una era de la armada cubana.

Se concreta el fracaso de Yadier Álvarez: los Dodgers de Los Ángeles se cansaron de Yadier Álvarez y lo pusieron en asignación, a riesgo de perderlo, en el último día de febrero.

Finalmente, nadie lo tomó. Álvarez permaneció en el equipo californiano, pero salió del roster de 40. Ese movimiento significa que su camino a las Grandes Ligas, que en 2019 parecía estar más despejado, ahora tiene otro obstáculo. Deberá demostrar que puede rendir de manera sostenida para que los Dodgers lo vuelvan a considerar.

Despiden a Roberto Baldoquín: El infielder llegó a los Angelinos de Los Ángeles y de Anaheim luego de que estos invirtieran 14 millones de dólares por hacerse de sus servicios. Su arribo a esa organización fue entre bombos y platillos, por ser comparado con Yunel Escobar y Adrián Beltré.

Según los planes, Baldoquín debió ser el parador en corto del futuro para el club celestial, pero eso nunca ocurrió. El tunero no pudo replicar su aceptable año en 2018 y volvió a fracasar ofensivamente durante la zafra 2019 en Doble A, máxima categoría en la que jugó en las Menores. Está por cumplir 26 años de edad y busca al menos un acuerdo que le permita seguir jugando siquiera en las sucursales de alguna organización.

Nada para Puig: el 4 de mayo, Yasiel Puig cumplirá medio año sin un equipo en las Grandes Ligas. Para su suerte, aún la campaña no ha empezado y él aún tiene tiempo de buscar dónde darle continuidad a su trayectoria en el big show.

El Caballo Salvaje partió en la agencia libre en 2019 como uno de los jardineros más apetecibles entre las piezas disponibles. Todos sus rivales de nombre estamparon su rúbrica, menos el antillano. Firmó Nicholas Castellanos, también Marcell Ozuna, al igual que Corey Dickerson, pero Yasiel sigue en espera de un conjunto para la venidera zafra.

Hace días, el toletero reveló que los Marlins de Miami le ofrecieron un contrato, pero la cifra no se ajustaba a su expectativa salarial, por lo que un rechazo de parte del slugger no se hizo esperar. Aún hay tiempo para Puig, rumores miles, de San Francisco a los Angels, aunque parece que cada vez hay menos clubes que ahora mismo están interesados en contratarlo.

La esperanza es que no nos quedemos sin ver a Yasiel Puig de vuelta a donde pertenece y que el 2019 no se su última imagen activa en la MLB.

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