ÚLTIMA HORA: Cuba DESPIDIÓ periodista deportivo por comentarios en redes

Por Robiel Vega

Los primeros indicios llegaron cuando, luego de una serie de críticas hechas al Presidente de la Federación Cubana de Béisbol y Comisionado Nacional de este deporte, Juan Reinaldo Pérez; Boris, junto a otros periodistas de los medios oficiales que se atrevieron a criticar el «papelazo» del federativo cubano cuando en Televisión Nacional aseguró que todo estaba listo para el inicio de la Serie Élite, cuando era completamente falso, fueron excluidos de una conferencia de prensa con directivos de la Teammate.

Luego de esto, los dirigentes cubanos intentaron maquillar lo ocurrido, alegando que ellos no tenían conocimiento de esto, pero Boris siguió haciendo distintos trabajos en redes sociales, en los que informó a la afición, detalles de lo ocurrido con el demorado envío de los uniformes e implementos, además que hizo varias críticas a las condiciones en las que estaban algunos estadios donde se jugaría el llamado a ser el principal torneo del béisbol cubano, que hasta ahora ha sido un rotundo fracaso.

“Quiero decirles a los lectores que me han preguntado, que ya no colaboraré más con Cubadebate porque mi contrato allí fue cerrado.

Sobre los motivos que me fueron dados prefiero no hablar, al final es una decisión de la dirección de ese sitio y no vale la pena defensas estériles ni fomentar shows mediáticos.

Si hago esta publicación es porque siempre le he dado a la comunicación la importancia que merece y no puedo simplemente desaparecer de allí por la puerta trasera sin darle una explicación a esos que me han seguido en sus páginas durante más de cuatro años.”

Así comenzó la publicación en su perfil de Facebook, en la que Boris anuncia que ya no será más colaborador de Cubadebate por que le fue cerrado su contrato, y aunque no quiso decir los motivos, lo cierto es que no hay que ser muy perspicaz para entender lo ocurrido.

Algunas personas me acusan de «incendiario» e inconforme; se molestan otros cuando hablo con la verdad en la mano porque creo es la única forma de espantar los demonios que atacan a nuestro pasatiempo nacional, porque la verdad quema.

La Liga Élite, esa que trato con todas mis fuerzas de que prenda en los aficionados, sigue dando tumbos como un borracho pestilente.

No sé cuántas veces he escuchado ya que «todo está garantizado», pero lo cierto es que los atletas continúan esperando los implementos necesarios para poder tener un mejor desempeño y para brindar un espectáculo decente.

Puedo decir con total conocimiento de causa que a esos muchachos no les han dado cintos, ni spikes, ni guantillas, ni muchas cosas más; y me pregunto si todo esto es un atraso de entrega de la Teammate o un problema de la Comisión Nacional que no se los puede garantizar.

Por otro lado, esos que salen todos los días bajo el sol abrasador de nuestro trópico a darnos alegrías, aún no han percibido su salario, que dicho sea de paso no es de élite ni diferenciado a pesar de todo lo que se ha escrito al respecto.

A eso hay que sumarle el cambio de sede a última hora de los partidos entre Portuarios y Cafetaleros, porque la provincia de Santiago de Cuba no pudo garantizar el hospedaje de los equipos, lo que provocó el traslado a Holguín, donde a pesar de la buena voluntad de su gente para que no se detuviera el torneo, no han podido brindarle un desayuno con calidad, tema que mejor ni toco en este comentario.

Hay otros aspectos que han frenado el despegue de esta liga, como el cambio de horario repentino de dos de los tres desafíos del domingo que conspiró contra la presencia de público en los estadios, y otros detalles de diseño y comunicación en nuestros medios televisivos y redes sociales que no están a la altura de un campeonato como este.

El éxito de esta liga está en el trabajo de todos. Es tarea compleja, pero hay que meterle «bomba», hay que amar este deporte al máximo y respetar a atletas y aficionados para que esto fluya, de lo contrario el calendario pasará bajo una lluvia de críticas y burlas, y jamás prenderá en las masas, que es uno de los objetivos fundamentales desde su concepción.

Estas palabras, escritas por Boris hace poco más de 24 horas en Facebook, parece que fue la tapa al pomo que llevó al despido de Cubadebate del prestigioso reportero matancero, una historia muy similar a la vivida por el colega de nuestro sitio SwingCompleto, Yasel Porto, cuando el desaparecido Higinio Vélez llevaba las riendas de la Federación.

Solo quiero decir que en todo este tiempo allí no fallé nunca. Los resúmenes de los partidos de los campeonatos domésticos, y el seguimiento a nuestro equipo nacional en los torneos internacionales, jamás faltaron.

Fueron más de 1600 días escribiendo de esa pasión nuestra con mis propios recursos, y a pesar de enfermedades, compromisos familiares, malas conexiones, y apagones, me las arreglé para que los textos siempre estuvieran ahí con la inmediatez que se merecen los lectores.

Seguiré con mi trabajo escribiendo sobre los equipos capitalinos desde mi trinchera en Tribuna de La Habana, un medio donde siempre he recibido un gran apoyo y se comprende, como diría nuestro Héroe Nacional José Martí, que la crítica es señalar con noble intento el lunar negro, y desvanecer con mano piadosa la sombra que oscurece la obra bella.

Según Boris, seguirá escribiendo para el periódico habanero Tribuna, esperemos que la cacería de bruja no incluya cerrar su contrato de ese medio también, todos sabemos los alcances que tiene la Federación Cubana de Béisbol y a quienes representa y lo que pueden hacer con quienes no se resignan a bajar la cabeza, callar y hacer ojos ciegos a la realidad.

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