En los últimos cinco años del pasado siglo numerosos aficionados recordarán un grupo de peloteros cubanos que fueron retirados forzosamente de las Series Nacionales y enviados a jugar en ligas de Japón, Colombia y Nicaragua. Francamente no recuerdo si en aquel entonces algún pelotero de la isla, a propósito de la inexplicable medida, también fuera a parar a Panamá. Varios jugadores cubanos que han marchado han participado en la Liga Profesional de ese país, y de nunca haber intervenido algún criollo a finales de los noventa en ligas istmeñas, no existen precedentes de beisbolistas de casa que hayan estado allí bajo la aprobación de la Federación Cubana.
El que más cerca estuvo fue el receptor villaclareño Yulexis La Rosa, hace tres años, sin embargo, el contrato no llegó a materializarse con los Caballos de Coclé, a pesar de haberse anunciado en Cuba. Pero pronto dos insulares pueden convertirse en los primeros en jugar en Panamá mediante la venia del organismo rector de la pelota en Cuba. Son ellos el lanzador matancero Yoanni Yera y el receptor tunero Yosvani Alarcón.
Obviamente, los dos jugadores no estarán en la Liga Profesional, que coincide con la Serie Nacional y concluyó en enero pasado con la presencia del lanzador tunero Ángel Rigoberto Cabrera como único representante de la isla. Sus servicios lucirán en el Campeonato de Beisbol Mayor y la noticia fue conocida en un tweet de David Salayandia, narrador de beisbol, corresponsal de Telemundo en Panamá y director del programa Frecuencia Deportiva. La información dice “los cubanos Yosvani Alarcón (receptor) y Yoanni Yera (lanzador) serían los dos refuerzos de Herrera para el béisbol mayor 2018”.
Este torneo, fundado en 1944, cuenta con doce equipos y Herrera, el elenco que recibirá a Alarcón y a Yera, es el más ganador de la historia de esa liga, con 16 títulos, entre los que destaca el de la Copa Centenario de 2003. Aunque todavía no se conoce la fecha de inicio, debe ser a principios de marzo, como suele ser tradicionalmente, y no se descarta que otros cubanos se desempeñen.
Ambos peloteros son figuras establecidas de la selección nacional cubana en el último lustro, por lo que serán refuerzos de lujo los que recibirá el plantel de Herrera para el próximo campeonato.
Yera es un serpentinero zurdo de 28 años con diez temporadas en el beisbol cubano y balance de 79 triunfos, 43 reveses, 824 ponches, 278 boletos y antes de la temporada pasada su efectividad era de 3.75.
En esta Serie del Caribe desarrollada en Guadalajara, lanzó 4.1 entradas en dos juegos, le batearon para .400, ponchó a cuatro y regaló igual cantidad de boletos. En la contienda 57, donde su equipo terminó en tercer lugar, fue líder en ponches (152), segundo en juegos ganados (12) y en entradas trabajadas (139.0) y tercero en efectividad (2.53).
Mientras que Alarcón, de 33 años, fue subcampeón con los Leñadores tuneros en la contienda anterior, donde fue octavo en carreras anotadas (60), sexto en imparables (104), tercero en dobles (21), quinto en jonrones (13), cuarto en total de bases (170), noveno en slugging (512), 55 impulsadas y .313 de average.
Alarcón, quien hoy tiene un yeso en su mano derecha a causa de una lesión en el último juego de la final ante Granma, es el receptor más ofensivo del beisbol cubano y resalta entre los cuatro mejores bateadores del país. Ha estado en 13 Series Nacionales, promedia por encima de .300, con 814 inatrapables, 115 jonrones y 453 impulsadas, además tiene entre sus virtudes ser un corredor rápido.
Entre 2008 y 2012 existió una apertura de mercado que favoreció a cada provincia que interviene en el Campeonato de Beisbol Mayor poder fichar a jugadores extranjeros. Pero después de 2012 la pelota mayor panameña se desarrolló fundamentalmente con el talento doméstico, aunque en 2017 varios lanzadores venezolanos participaron, pagados por la Federación Panameña de beisbol.
Como nota curiosa, Yera y Alarcón serán dirigidos por el matancero Israel Delgado, conocido en la pelota canalera como Trespatines, quien llegó a Panamá a finales de 2000 para ser el manager del conjunto de Herrera. Nació el 21 de octubre de 1952 en el municipio de Jagüey Grande y fue el timonel que ganó los cuatro títulos que tienen los herreranos en este siglo.
En su historia como mentor en la pelota panameña tiene más victorias que reveses y en 2007 sustituyó al pinareño Alfonso Urquiola como director de la selección nacional istmeña, tras el fracaso en los Juegos Panamericanos de Río de Janeiro 2007.