A prisión Francisco «Kid» Rodríguez: Evento que sacudió MLB

Guillermo Sánchez

MLB

Este altercado de Francisco Rodríguez sepultó su exaltación al Salón de la Fama de Cooperstown.

Este altercado de Francisco Rodríguez sepultó su exaltación al Salón de la Fama de Cooperstown.

Si hablamos de peloteros venezolanos en MLB que poseen una gran carrera en el mejor beisbol del mundo, el nombre de Francisco Rodríguez es uno de los que no debe faltar. El oriundo de Caracas anunció su retiro de Grandes Ligas en 2017, luego de una carrera sensacional de 16 años, donde se convirtió en uno de los refrentes en Venezuela y de Las Mayores en sí misma. No obstante, una gran carrera y una gran fama, conllevan también una gran carga de responsabilidad.

Francisco Rodríguez, el reconocido «Kid», fue uno de los mejores lanzadores relevistas en la historia de Major League Baseball y podríamos decir una leyenda en su equipo de siete años, Los Angeles Angels. Sin embargo, en el año 2010, cuando portaba el uniforme de New York Mets, protagonizó un hecho lamentable con el que fuera su suegro, Carlos Pena.

Origen del altercado

El 11 de agosto de 2010, una escena inusual, altamente mediática y realmente bochornosa tuvo lugar en el Citi Field, casa de New York Mets, un hecho que sacudió los cimientos de MLB. Tras una derrota por 6-2 ante Colorado Rockies, Francisco Rodríguez, en ese entonces el estelar cerrador del conjunto neoyorquino, se vio envuelto en un altercado físico con su suegro, Carlos Pena.

De acuerdo a los reportes, el hecho ocurrió en el salón familiar del estadio, un área donde generalmente se reúnen las familias de los peloteros del equipo. Fueron ellos mismos quienes manifestaron que el Sr. Carlos Pena resultó con un rasguño en la cara y un golpe en la cabeza, situación que ameritó incluso el traslado al hospital.

Este altercado de Francisco Rodríguez sepultó su exaltación al Salón de la Fama de Cooperstown.

Consecuencias del evento para Francisco Rodríguez

Las consecuencias del hecho no tardaron mucho en llegar. «El Kid» fue detenido y arrestado por la policía, siendo acusado de agresión en tercer grado. Los tribunales impusieron una orden de alejamiento con Carlos Pena y fue puesto en libertad sin necesidad de fianza. De igual forma, New York Mets reaccionó de inmediato y suspendieron al lanzador venezolano por dos días, una sanción que resultó en más de 125.000 dólares.

La querella en la fiscalía siguió hasta finales del año 2010 y fue allí que Francisco Rodríguez se declaró culpable de intento de agresión, con ello evitó la cárcel, pero fue sentenciado a cumplir con 52 semanas de un taller para manejar sus emociones. Además, compensó a Carlos Pena con casi 15.000 dólares de gastos médicos y 1.000 dólares de multa.

Este altercado de Francisco Rodríguez sepultó su exaltación al Salón de la Fama de Cooperstown.

¿Afectó su carrera en Grandes Ligas?

Aunque obviamente no es algo que se pueda comprobar, se tiene la creencia de que este evento significó un punto de inflexión en su carrera deportiva. Pese al gran talento que poseía, siendo incluso líder de salvamentos en el 2008 con 62, su imagen pública se fue en picada y nunca más volvió a ser ese gran lanzador relevista.

Diferentes analistas deportivos concluyen en que incluso este hecho lo marginó de una potencia exaltación al Salón de la Fama de Cooperstown, a pesar de sus grandiosos números en MLB (Al día de hoy es el sexto lanzador con más rescates en la historia de Las Mayores con 437).

Aunque las causas exactas del altercado no se hicieron públicas en detalle, se especuló que pudieron haber sido comentarios hirientes por parte de su suegro, posiblemente relacionados con un miembro de su familia.

6 comentarios en «A prisión Francisco «Kid» Rodríguez: Evento que sacudió MLB»

  1. Es triste ver cómo un incidente personal puede empañar una carrera tan exitosa en el béisbol. Sin duda, Francisco Rodríguez tenía un talento indiscutible. Sin embargo, como bien apunta el artículo, con la fama también viene una gran responsabilidad. Espero que la nueva generación de jugadores aprenda de estos errores y comprenda la importancia de mantener una conducta ejemplar tanto dentro como fuera del campo.

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  2. Amigo, Francisco Rodríguez no es el » santo niño de Atoche» que usted cree. Cómo leyenda del beisbol y de los tiburones de la Guaira, le digo, que este carajo es prepotente, falta a de humildad que por haber sido un gran lanzador, también lo convirtió como muchos venezolanos de origen humilde en un patán cuando tienen » cuatro puyas» en sus bolsillos. Sus actuaciones públicas lo demuestran. No se inmole por este tipo

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  3. Escuchen bien:La vara con que midieron la actuación de Pete Rock,, obvio no es la misma con que midieron al Kit,si hubiese nacido Cubano,el berrinche de la pequeña habana se habría escuchando en el Vaticano,pero el.pobre nació en un recóndito lugar de Caracas llamado Macarao.El caso es: lo pobre de nuestro sentido de pertenencia,como nacion

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    • Amigo, Francisco Rodríguez no es el » santo niño de Atoche» que usted cree. Cómo leyenda del beisbol y de los tiburones de la Guaira, le digo, que este carajo es prepotente, falta a de humildad que por haber sido un gran lanzador, también lo convirtió como muchos venezolanos de origen humilde en un patán cuando tienen » cuatro puyas» en sus bolsillos. Sus actuaciones públicas lo demuestran. No se inmole por este tipo

    • Eso es cierto: un moderno refrán dice «El peor enemigo de un venezolano en el exterior es otro venezolano» Sin justificar lo que hizo «El kid» porque eso no estuvo bien, uno de los mayores defectos que tenemos los venezolanos es la desunión.

      Aparte de que con frecuencia cometemos el pecado capital de la envidia. No podemos ver que un compatriota haya triunfado y se haya hecho rico a fuerza de trabajo y disciplina en cualquier actividad, porque en vez de felicitarlo y seguir su ejemplo, la envidia nos corroe por dentro ¡Y algunos hasta desean que lo pierda todo!

      ¡Y no me vengan a caer encima porque eso es verdad!
      Como dijo Nuestro Señor Jesucristo
      «Aquel de vosotros que esté libre de pecado, que lance la primera piedra!

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