Tabla de contenidos
Desde su debut en 2018, Ronald Acuña Jr. se ha consagrado como una de las caras más sobresalientes del sistema de las Grandes Ligas, así como también, su humanidad ha transmitido un cúmulo de orgullo para una generación entera de fanáticos latinoamericanos.
Con un talento desbordante, carisma y un estilo único que lo hace vibrar en los terrenos ligamayoristas, el sabanero se convirtió rápidamente y de manera indiscutida en un ídolo. Pero con esa adoración también llegó una presión que no se ve y que no se solventa con una base robada.
Hasta la fecha, mientras permanece en la lista de lesionados de 10 días por una distensión grado 1 en la pantorrilla derecha sufrida el pasado 29 de julio de 2025, frente a Kansas City Royals, Ronald Acuña Jr. enfrenta un tipo distinto de desafío, el cual es el de convivir con el silencio, la pausa y las preguntas que llegan cuando su energía no está en el terreno.
Ronald Acuña Jr y el peso de representar a muchos
El oriundo de La Sabana, estado La Guaira, carga sobre sus hombros la representación de Atlanta Braves, de Venezuela y de la pelota latinoamericana. Por eso, cada vez que se detiene, frena su exitoso palmarés y el ritmo de quienes lo siguen desde Caracas, Maracay, Maracaibo o desde cualquier rincón con bandera tricolor.
Esa presión es silenciosa y palpable, sobre todo cuando surge la interrogante de que si podrá retornar a los campos de MLB al mismo nivel que ha mostrado desde el día uno. Con dos roturas de ligamento cruzado anterior (rodilla derecha e izquierda), Ronald Acuña Jr sigue enfrentando problemas en su cuerpo que de una manera u otra pone ante la palestra pública un sinfín de dudas que con su madero en más de una ocasión han sido calladas.
El periodista Miguel Ángel Fuenmayor compartió el 5 de agosto de 2025, que Acuña ya se encuentra tomando rollings en el infield, por lo que se le ve tranquilo llevando su rehabilitación día a día. Pero más allá del aspecto físico, hay una dimensión mental que a menudo queda fuera del radar y es la ansiedad de sentirse responsable de no fallar, de tener que volver siempre al 100%, como si la perfección fuera el mínimo aceptable.
El descanso también puede sanar por dentro
Esta breve pausa un tanto forzada, puede ser también una oportunidad para el venezolano. Lejos de los focos diarios, Ronald Acuña Jr puede reconectar con el juego desde otro ángulo, mirar el diamante sin la urgencia de rendir cada noche, recordando el por qué juega y por quién juega. Aunque el calendario apriete y las expectativas no bajen, quizás entienda que ser líder también implica mostrarse humano.
El béisbol le ha dado todo, pero también le ha exigido más de lo que parece. Acuña Jr, con apenas 27 años de edad, carga con una narrativa que a muchos les pesa recién entrando en los 30. Por ahora, el regreso será paso a paso, pero cuando vuelva pretende traer su potencia.
Para más información de Atlanta Braves, haga click aquí.
Venezolana | Con una profunda pasión por el béisbol, el deporte más bonito del mundo. Desde muy pequeña, he sido una ferviente seguidora de este increíble pasatiempo, lo que me ha llevado a involucrarme activamente en este ámbito.
Actualmente, soy autora, editora y miembro del equipo ejecutivo de Swing Completo, donde combino mi formación técnica con mi amor por el deporte para ofrecer contenido de alta calidad y relevancia para los aficionados del béisbol.