Randy Arozarena ovacionado en su regreso a Tampa Bay

Adrián Bonilla

Arozarena está sumando uno de sus mejores años en Grandes Ligas plasmando tope de jonrones con 26.

Randy Arozarena, recibió una grata e inesperada sorpresa en su visita al George M. Steinbrenner Field

El pelotero cubano de Seattle Mariners, Randy Arozarena, recibió una grata e inesperada sorpresa en su visita al George M. Steinbrenner Field en el marco del inicio de la serie entre los náuticos y Tampa Bay Rays. El oriundo de Pinar de Rio resultó ovacionado por el público presente apenas en su primer turno de la tarde este lunes 1 de septiembre.

Randy entró al cajón de los bateadores como primer bate y defensor de la pradera izquierda, pero antes de enfocarse en el turno, el representante internacional de México se apartó de la caja para quitarse el casco y agradecer a los miles que se levantaron de su asiento para rendirle tributo y agradecer por sus años de servicio a la organización de Tampa Bay.

El cubano al ser anunciado por los altavoces del recinto primaveral de Yankees automáticamente generó el bullicio de sus antiguos seguidores, dando por sentado el cariño y respeto que sembró en sus años con Rays.

Randy Arozarena dejó un gran legado en Tampa

El pelotero cubano de 30 años de edad jugó cuatro temporadas y media con el conjunto de Tampa antes de ser canjeado a mitad de la campaña del 2024. Durante sus años como miembro de Rays fue uno de los jugadores con mayor rendimiento individual, incluso protagonizó una postemporada de ensueño donde su equipo terminó cayendo en la Serie Mundial ante Los Angeles Dodgers.

Tras 568 juegos como pieza de Tampa Bay, el pinareño reunió 531 hits, 113 dobletes, nueve triples, 85 jonrones, 289 carreras remolcadas, 321 rayitas anotadas, 94 bases robadas, 233 boletos recibidos y una línea ofensiva de .255 de average, .345 de OBP, .441 de SLG y un OPS de .786, además de un WAR de 11.7.

Respondió con el madero en simultáneo

Luego de acabarse la ovación y el «romántico» momento entre Randy y los miles de aficionados, el cubano no le tuvo piedad a Shane Baz pegándole un hit de 107.5 millas por hora, acto seguido se robó la segunda almohadilla y se quedó esperando remolque de sus compañeros a pesar de su buen accionar.

Arozarena está sumando uno de sus mejores años en Grandes Ligas plasmando tope de jonrones con 26 y acercándose a otros como en bases robadas y carreras anotadas. Hasta la fecha, Randy en 2025 batea para .242/.338/.454/.792, con 66 carreras impulsadas, 29 dobles, un triple y 53 boletos recibidos.

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