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Después de un año, José Iglesias volvió este 16 de septiembre a la que fue su casa por una temporada en su carrera en MLB, el Citi Field, casa de New York Mets. En su vuelta a la Gran Manzana, el equipo le dedicó un emotivo video en la pantalla del recinto, recordando el paso del pelotero cubano por la franquicia en 2024.
Este martes 16 de septiembre New York Mets y San Diego Padres iniciaron una serie de tres compromisos en Queens, oportunidad que aprovechó el equipo neoyorquino para darle un homenaje al infielder antillano que fue parte importante en el roster durante la campaña pasada de Grandes Ligas.
Con su tema musical “OMG” en el ambiente del estadio, José Iglesias regresó a Citi Field y al ritmo de la canción el equipo proyecto un video a las pantallas, siendo seguramente un momento significativo en la carrera de este pelotero cubano que este año con San Diego juega su campaña número 13 en la Gran Carpa.
José Iglesias y su “OMG” regresaron a Citi Field
Antes del primer lanzamiento, el Citi Field se puso de pie para reconocer a José Iglesias, quien fue homenajeado con un emotivo video proyectado en la pantalla principal, recordando jugadas brillantes y momentos que marcaron su paso por esta franquicia. Más allá de las estadísticas, los aficionados revivieron la chispa y el entusiasmo que el veterano infielder cubano aportó en una temporada que parecía perdida tras un arranque de 0-5.
«Candelita«, como es apodado, se convirtió en un motor dentro y fuera del terreno, guiando a los dirigidos por Carlos Mendoza hasta la Serie de Campeonato de la Liga Nacional en 2024. Su influencia se sintió tanto en el clubhouse, como en el diamante, donde combinó liderazgo, consistencia al bate y seguridad defensiva. El homenaje fue, en definitiva, un reconocimiento al papel crucial que desempeñó en una de las campañas más inesperadas y memorables del equipo en los últimos años.
Así bateó el cubano en la Gran Manzana
En apenas 85 juegos vistiendo el uniforme de New York Mets, José Iglesias dejó huella con una producción ofensiva que sorprendió a muchos. Su promedio de .337, junto con un OPS de .830, lo convirtieron en una pieza confiable en el lineup. Más allá de los números, mostró una solidez con el guante a la altura, dando seguridad en el cuadro y aportando la calma que necesitaba un equipo que vivía momentos de presión.
Si embargo, su rendimiento bajó en los Playoffs, donde bateó .227 con tres impulsadas en 12 encuentros, pero su influencia no pasó desapercibida, ya que se mantuvo como un jugador clave gracias a su entrega, disciplina y experiencia, consolidándose como uno de los líderes silenciosos de aquella campaña.
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Periodista especialista en deportes. Graduado de Periodismo en 2021. Experto en beisbol invernal y Grandes Ligas, diversas coberturas internacionales, que incluyen la Serie del Caribe