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Para Luisangel Acuña, la temporada MLB 2025 no fue llevada a cabo a nivel personal como muchos esperaban, pero sí logró consolidarse como un paso necesario dentro de su desarrollo. El joven infielder de New York Mets vivió un año de contrastes, donde el entusiasmo inicial dio paso a un proceso de adaptación que aún continúa.
Con solo 23 años de edad, el hermano del extraclase pelotero venezolano Ronald Acuña Jr. sigue buscando su identidad dentro del sistema de una organización que, pese a las expectativas, atraviesa una etapa de reconstrucción.
Luisangel Acuña arrancó el año en el roster grande tras un impresionante Spring Training, pero el salto al nivel de Grandes Ligas resultó más exigente de lo previsto. En 175 turnos al bate dejó promedio de .234, con ocho carreras impulsadas y sin cuadrangulares, aunque mostró destellos de su mejor herramienta, la velocidad, al estafarse 16 bases. Sin embargo, su producción ofensiva inconsistente y los ajustes defensivos del rival lo llevaron a perder terreno en la alineación.
Año de aprendizaje para Luisangel Acuña
En junio, los metropolitanos optaron por enviarlo nuevamente a Triple-A Syracuse, buscando que ganara confianza y ritmo. Allí mejoró su contacto y paciencia en el plato, aunque el poder sigue siendo la gran deuda de su juego.
Luisangel Acuña carga con un apellido que abre puertas, pero también genera presión. Comparado inevitablemente con su hermano Ronald Acuña Jr., el venezolano ha tenido que aprender a convivir con la expectativa externa y construir su propio camino. A diferencia del estrellato temprano de Ronald, el proceso de Luisangel es más pausado, yendo de la mano con el desarrollo técnico y la madurez.
New York Mets aún lo ve como una pieza importante para el futuro de la franquicia y es por ello que de momento, confiarán en su avance de cara a la nueva temporada de MLB 2026. Con una excelsa versatilidad defensiva (puede jugar tanto en el shortstop como en la segunda base) se ha plantado en el equipo como un pelotero de perfil atractivo para la filosofía moderna de los neoyorquinos.
peso del apellido y la visión a largo plazo
El propio Acuña ha reconocido en entrevistas previas que su prioridad es “seguir aprendiendo del juego y mejorar cada día”. Mets, por su parte, no tienen prisa; su ventana competitiva apunta a 2026-2027, y el desarrollo de jugadores jóvenes como él encaja en ese calendario.
La temporada 2025 de Luisangel Acuña no fue brillante en los números, pero sí valiosa en lecciones. A veces, los grandes saltos en una carrera no se ven en la caja de estadísticas, sino en los ajustes silenciosos del día a día. Si logra conectar ese potencial con consistencia, los Mets podrían tener en él mucho más que una promesa.
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Venezolana | Con una profunda pasión por el béisbol, el deporte más bonito del mundo. Desde muy pequeña, he sido una ferviente seguidora de este increíble pasatiempo, lo que me ha llevado a involucrarme activamente en este ámbito.
Actualmente, soy autora, editora y miembro del equipo ejecutivo de Swing Completo, donde combino mi formación técnica con mi amor por el deporte para ofrecer contenido de alta calidad y relevancia para los aficionados del béisbol.