Jorge Soler se vistió de héroe y asumió el rol que le toca con los Marlins cuando en la baja de la novena entrada dejó al campo a los Washington Nationals con un espectacular bambinazo que enloqueció a todo Miami.
Con desventaja de 4×2 llegaron los Fish a la parte baja de la novena entrada y los dos primeros bateadores, Joey Wendle y Garrett Hampson fueron dominados. La victoria para los capitalinos parecía cuestión de tiempo.
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La chispa la prendió el inicialista Garrett Cooper con su cuarto doblete de la temporada tras una poderosa línea al jardín izquierdo. Luis Arráez le dio un poco de oxígeno al equipo con un sencillo remolcador al jardín derecho y Jon Berti, quien fue traído para correr en primera por el venezolano se robó la segunda y puso el empate en posición anotadora.
Le correspondió el turno a Jorge Soler, quien no se desesperó. Se metió en conteo y ya con la cuenta máxima de tres bolas y dos strikes, no creyó en las 99 millas por hora del cerrador Harvey y con un impacto de 110.7 MPH mandó la pelota hasta los 405 pies por todo el left-center field.
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El batazo fue el clásico jonrón de Soler; desde que salió nadie tuvo la menor duda de que la pelota se iba más allá de la cerca del LoanDepot Park, que se rindió ante los pies de su slugger.
El público enloqueció con lo que fue el décimo jonrón del cubano en lo que va de temporada y el 144 de su carrera. Además quedó a una empujada de las 400 en su carrera llegando a 22 en este 2023.