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El de este 16 de mayo fue el encuentro número 21 para Agustín Ramírez desde su debut en MLB el pasado 21 de abril. Sin embargo, esas tres semanas parecen ser suficientes para que sea fuertemente considerado para optar al premio de Novato del Año en la Liga Nacional, cumpliendo con las expectativas, dado que ha estado incluso en partidos de futuras estrellas.
Frente a Tampa Bay Rays, en el loanDepot Park, dio una nueva demostración de que todas esas consideraciones que hay sobre él no son casualidad, sino que se lo tiene bien ganado, estableciendo marcas pese a su juventud.
Mientras se desarrollaba el primer episodio, Agustín Ramírez bateó como segundo en el orden del lineup en el cuadro de Florida. Lo hacía con un hombre en la inicial, sin outs. Fue allí que tendría al frente a Taj Bradley, quien se empezaba a complicar, poniéndose en 2-2 frente al receptor quisqueyano, que fue paciente y esperó hasta que llegó una recta a 97 millas por hora.
El dominicano busca quedar en la historia de Miami Marlins
El nacido en Santo Domingo consiguió enlazar esa pelota de línea para alejarla a unos 256 pies por el jardín derecho, lo que le dio tiempo para llegar a la intermedia, mientras que el corredor de primera alcanzó la antesala.
Esta resultó una acción clave, dado que el siguiente bateador, Eric Wagaman, conectó un elevado de sacrificio que puso el 1×0 parcial.
De esta manera, Agustín Ramírez marcó un registró histórico dentro de Miami Marlins, puesto que desde 2015, es decir, hace 10 años, no se veía que un catcher de esta organización sume 10 dobletes en una campaña de MLB. El último fue JT Realmuto, que en dicho curso registró 21 en 126 cotejos.
No sería descabellado pensar que el dominicano supere esa cifra, ya que apenas se juega el primer cuarto de temporada 2025.
Agustín Ramírez mostró madurez
Además, en su siguiente turno dio muestra de madurez en el plato. Con el juego empatado 1×1, Ramírez volvió a verse las caras con Bradley, aunque con par de outs y las bases llenas. Era una gran oportunidad para que Marlins se coloque al frente y exprimió al máximo la cuenta. Allí, en 3-2, no le hizo swing a un splitter que estaba fuera de la zona de strike y así remolcó una para Miami.
Posteriormente, su compañero Connor Corby le hizo pasar por la registradora gracias a un doblete que barrió las bases y puso el compromiso 5×1.
Ahora, Agustín Ramírez dejó su average en .266, con 11 rayitas empujadas y nueve anotadas. También exhibe un porcentaje de slugging de .582, producto de sus cinco jonrones. Lo más impresionante es que de sus 21 hits, 15 son extrabases, lo que habla de su poder al momento de batear.
Por el momento, la organización de Florida marcha última en el Este de la Liga Nacional, con apenas 16 victorias de 26 posibles.