Un hecho de juego limpio se vivió en la jornada del martes en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, que tienen lugar en San Salvador. La protagonista de esta acción fue una atleta cubana, Laina Pérez.
La antillana obtuvo el cuarto lugar en el evento de pistola de aire a 10 metros, superada por tres representantes de México: Andrea Ibarra, Alejandra Zabala y Alejandra Cervantes.
Lo increíble vino después. Directivos de la competencia retiraron la medalla de bronce a la ocupante del tercer peldaño y se lo otorgaron a Laina, por una absurda ley.
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Según el representante oficial que se reunió con las deportistas, el reglamento no permite que un mismo país cope el podio, así que el metal bronceado le correspondía a la cubana.
«Un país solamente puede obtener dos medallas, ya sea medalla de oro y plata, y si es de bronce se recorre al cuarto lugar» , fueron las palabras del mensajero de la organización Centro Caribe Sports.
Laina Pérez aceptó la presea, pero rápidamente se la retiró y fue en busca de la verdadera ganadora del sitial más bajo del podio.
La tiradora nacida en Matanzas demostró el verdadero espíritu deportivo cuando expresó:
«Quien hizo el reglamento no fue atleta o se le olvidó enseguida. Es injusto que alguien que se lo gane en competencia no se lo pueda llevar a casa. No tiene justificación, es absurdo. La medalla no es mía, es de ella» concluyó la deportista de Cuba.
El gesto de Laina Pérez fue aplaudido por su deportividad y su comprensión de la situación. Su acción ha sido ampliamente elogiada en redes sociales y se ha convertido en un ejemplo de Fair Play y espíritu deportivo en los Juegos Centroamericanos y del Caribe San Salvador 2023.
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