El ciclo de partidas y abandonos sigue siendo habitual en las diferentes selecciones nacionales de Cuba que toman parte en eventos extrafronteras. En la fecha del 10 de diciembre se conoció de un nuevo caso. Esta vez, el suceso se originó en el equipo nacional masculino sub-21 de balonmano.
Según reportó el medio de comunicación Cubalite, la acción ocurrió en México, nación en la que se desarrolló el Torneo IHF de Norceca, que otorgó boletos para el Mundial de la categoría, así como para los Juegos Panamericanos Junior, eventos que tendrán lugar en el año 2025.
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La formación de la isla sufrió una baja en la etapa clasificatoria, que dejó a la escuadra con un integrante menos. Se trató del caso de Josué Antonio Echevarría Vilchies, atleta que escapó de la concentración y decidió emprender una nueva vida, lejos del pasado en su tierra natal.
La noticia del medio de comunicación reveló una declaración de un familiar del atleta en cuestión, quien reconoció que es una certeza comprobada la huida de Echeverría, quien en su primera incursión en lides foráneas dio el decisivo paso.
Jugador del equipo Cuba abandonó selección nacional
«Josué decidió no regresar a Cuba y quedarse en México, por ahora. No estuvo con el equipo en la semifinal contra México. Después del último partido de la primera fase, desapareció. Aprovechó su primer viaje al extranjero para tomar esta difícil decisión”, dijo la persona con lazos sanguíneos con el balonmanista.
Josué Antonio Echevarría Vilchies fue una figura que aportó al equipo nacional en la competición y asumió su papel en la cancha. El pinareño participó en los éxitos de su combinado ante Puerto Rico, República Dominicana y Martinica en la fase clasificatoria, pero no se presentó a la instancia semifinal.
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La tropa de Cuba obtuvo el tercer lugar en la justa y perdió el chance de aterrizar en el Campeonato Mundial, pues este privilegio correspondió a los dos primeros puestos del torneo. Los bisoños jugadores de la Mayor de las Antillas fueron testigos de la decisión radical de uno de sus compañeros.
Año tras año la situación parece clonarse y no hay límites de edad ni de disciplinas. Los deportistas de Cuba siguen buscando una mejoría en sus vidas personales y aprovechan la más mínima oportunidad para cumplir este sueño.
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