Rolando Romero (16-2), boxeador estadounidense pero que posee raíces cubanas debido a que su padre es originario de la Mayor de las Antillas, volvió a la senda del triunfo en la jornada del sábado 14 de septiembre. «Rolly» formó parte de la cartelera que tuvo como pelea principal el muy promocionado duelo entre el mexicano Saúl «Canelo» Álvarez y el puertorriqueño Edgar Berlanga. Romero obtuvo el triunfo por decisión unánime ante Manuel Jaimes (16-2), aunque el choque careció del brillo que caracteriza al pugilista con genes antillanos.
La plaza del T-Mobile Arena en Las Vegas resultó el escenario en el cual tuvo lugar el enfrentamiento. Dicho emparejamiento abrió las confrontaciones del show principal, por lo que millones de espectadores disfrutaron de las acciones.
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Rolando Romero, quien perdió su título mundial de la AMB en su anterior presentación ante el mexicano Isaac Cruz, vivió una tensa fecha, pues una nueva caída lo iba a alejar definitivamente de las opciones de recuperar los puestos de privilegio. «Rolly», a sabiendas de esto, pretendió mostrar una actitud de constante ataq** ante su oponente de turno.
El primer round resultó de un estudio por los implicados, quienes trazaron un plan estratégico que poco a poco evidenció más golpes. Sin embargo, Rolando Romero decidió cambiar su postura y arreció su azote.
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Rolando Romero venció en Las Vegas
Los episodios dos y tres fueron del dominio del de sangre cubana, quien encontró repetidas veces la anatomía de Jaimes. Pero, este último intentó cambiar la historia y en el cuarto as**to logró conectar al extitular universal más de una vez.
Rolando Romero, con una vasta experiencia sobre los rings, no se desesperó y aprovechó el momento exacto para desembarcar sus combinaciones, lo que comenzó a dar resultados. Poco a poco se hizo el dueño de la situación. Los impactos más certeros nacieron de los puños del cubanoamericano.
Los rounds comenzaron a pasar y el cansancio físico se hizo presente, aunque Rolando Romero luchó por no bajar la intensidad. Esta pretensión resultó una imposibilidad y la pugna entró en un limbo que le quitó lucidez.
Manuel Jaimes quiso cambiar la historia en el octavo as**to, pero ya el pleito estaba decidido y los 10 capítulos previstos se esfumaron en la misma rutina. La decisión de los jueces favoreció a Rolly con un triple 99-91, lo que lo devolvió a la senda de los triunfos.
Rolando Romero solventó la noche con una decisión positiva, a pesar que sus prestaciones quedaron lejos de sus mejores atributos. Pese a esto, su nombre vuelve a estar entre los candidatos a tener la posibilidad de reencontrarse con la cima de su división.
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