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La temporada MLB 2025, ha sido un festival de batazos largos y, en medio de ese show, Cal Raleigh se ha convertido en el protagonista absoluto con sus 60 cuadrangulares. El catcher de Seattle Mariners no solo ha desatado su poder, también está peleando directamente con Aaron Judge por el MVP de Liga Americana. La pregunta es inevitable: ¿será suficiente esa destacada cifra para quedarse con el premio?
Raleigh no solo ha firmado la mejor temporada de su carrera hasta los momentos, también ha roto récords históricos. Se convirtió en el jugador con más cuadrangulares en la historia de la franquicia de Seattle, además de convertirse en el receptor con más jonrones en toda la historia de las Grandes Ligas y, como si fuera poco, también es ya el bateador ambidiestro con más cuadrangulares en una sola campaña. Una temporada que quiere cerrar con broche de oro: el MVP de Liga Americana.
Pero su candidatura debe medirse contra la historia. Apenas nueve jugadores en MLB han alcanzado los 60 jonrones en una temporada: Babe Ruth (1927), Roger Maris (1961), Mark McGwire (1998 y 1999), Sammy Sosa (1998, 1999 y 2001), Barry Bonds (2001), Aaron Judge (2022) y ahora Cal Raleigh en 2025. La lista es corta, pero la duda es otra: ¿cuántos de ellos se llevaron el premio al Jugador Más Valioso?
¿El poder es suficiente para llevarse el premio?
La respuesta es que no siempre. De esas nueve temporadas previas, con más de 60 cuadrangulares, solo en cuatro ocasiones los sluggers terminaron levantando el MVP. Roger Maris lo hizo en 1961, Sammy Sosa en 1998, Barry Bonds en 2001, y Aaron Judge en 2022.
En realidad, podrían y deberían haber sido cinco. En 1927, Babe Ruth se convirtió en el primero en alcanzar los 60 jonrones en la historia de la liga, pero no pudo quedarse con el premio debido a una regla de la Liga Americana que impedía que un jugador lo ganara más de una vez. Ruth ya lo había obtenido en 1923, por lo que ese año el galardón fue para Lou Gehrig, su compañero de equipo.
En otras ocasiones, el poder chocó entre sí. En 1998, Mark McGwire (70 HR) y Sammy Sosa (66 HR) compitieron en la Liga Nacional, terminando el premio terminó en manos del dominicano. Algo similar ocurrió en 2001, cuando Barry Bonds (73 HR) le ganó la pulseada a un Sosa que había conectado 64.
La excepción más llamativa se dio en 1999, cuando ni Sammy Sosa (63 HR) ni Mark McGwire (65 HR) se llevaron el MVP. Ese año, el galardón fue para Chipper Jones, que no alcanzó la cifra de 60 bambinazos, pero sí firmó una campaña más completa para los votantes.
¿Es Cal Raleigh candidato al MVP Liga Americana con sus 60 jonrones?
La tendencia histórica es clara: solo cuatro de nueve lograron convertir la marca en el premio. Cal Raleigh quiere ser el quinto y además, el primero en hacerlo en la Liga Americana sin ser jugador de los Yankees de Nueva York.
La batalla no será sencilla. Aaron Judge presenta un caso sólido con su promedio de .330, 51 jonrones y 109 impulsadas, además de liderar en bWAR (9.2), OBP, slugging y OPS la Liga Americana. Raleigh, sin embargo, tiene a su favor la rareza de su posición. Un catcher con 60 cuadrangulares, 125 impulsadas y un bWAR de 7.2, encabezando toda la MLB en poder desde una posición tan exigente como lo es la receptoría.
Lo cierto es que el desenlace promete un choque de peso histórico. Cal Raleigh busca devolver el premio más deseado entre los jugadores al T-Mobile Park, algo que no ocurre desde hace 24 años, cuando Ichiro Suzuki brilló en 2001 como MVP y Novato del Año. ¿Será suficiente para el receptor de 28 años su fuerza para llevarse el premio MVP de la Liga Americana?
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Docente y Experto en Gestión Deportiva
Con una formación especializada en herramientas gerenciales para organizaciones deportivas, me desempeño como analista y experto en MLB. Soy Senior Writer de los New York Yankees y desde 2021, ejerzo como Jefe Editorial de Swing Completo. Además, soy el CEO de «La Tribuna Deportiva», donde lidero la creación de contenido deportivo de alta calidad y relevancia.
Mi experiencia y conocimiento en el ámbito deportivo me permiten ofrecer análisis profundos y bien fundamentados, destacando por mi capacidad para comunicar y educar tanto a profesionales del deporte como a aficionados.