Por Boris Luis Cabrera
Luis González sacó una pelota por encima de los colchones y Yosimar Cousín no permitió libertades, para que los Toros camagüeyanos vencieran a los felinos de Industriales 5-3 por segunda jornada consecutiva en los predios del Latinoamericano.
Cousín, cerró la reja de los Leones y se tragó la llave durante los siete episodios que se mantuvo en el montículo, permitiendo apenas una anotación en todo el trayecto y dando cinco latigazos, para anotarse así su tercera victoria de la temporada.
La Toros de la llanura, sueltos y desafiantes por la arcilla capitalina desde las últimas entradas del partido del jueves, continuaron arremetiendo contra los paños azules y pisaron la goma del plato tres veces en los dos primeros capítulos robándose la iniciativa.
Rolatas impulsadoras con las bases llenas de Alexander Ayala y del prospecto Loidel Chapellí y cohete remolcador de Yosbel Pérez, se encargaron de plantar bandera en el estadio mientras la exigente fanaticada industrialista criticaba en todas direcciones y se lamentaba por las maldiciones ancestrales de los números trece.
Aun así, el joven Bryan Chi, logró sacudirse el polvo del uniforme y le colgó cinco argollas al hilo a la tropa de Miguel Borroto, pero ni siquiera el debut de Stayler Hernández pudo levantar motivaciones en la banca de los anfitriones, amansados y pasivos hasta las postrimerías del choque.
En el octavo, antes que el veterano Vicyohandri Odelín tomara las riendas del partido, Luis González le arrancó un suspiro a sus parciales con un bambinazo de dos carreras que mantuvo a los suyos en el segundo puesto de la tabla de posiciones del campeonato.
A la hora de recoger los bates y las pelotas, otra vez los espíritus de glorias deportivas que vagan a diario por los graderíos del coloso del Cerro trataron de sacarle esa estirpe a su descendencia y parpadearon lucecitas de esperanza en la banca de tercera cuando Lisbán Correa y Jorge Enrique Alomá pegaron dobletes consecutivos, Oscar Valdés trajo otra a casa con un elevado de sacrificio y Dayron Blanco se anotó un sencillo, pero el traje de héroe no le sirvió al recién incorporado Stayler, quien murió en rolata inofensiva al primer cojín para disolver las alegrías tardías de los presentes.
Este viernes trece, fue la derrota número trece de los Industriales frente a trece derrotas y entre malos augurios y supersticiones continuaron fuera de la zona de comodín a falta de seis subseries particulares para vencer la etapa clasificatoria.
A partir de este domingo recibirán a los Vegueros de Pinar del Rio, choque que será crucial para lograr el objetivo de buscar la corona número trece en la historia de las Series Nacionales. Nos vemos en el estadio.