Finalmente después de el jonrón que conectara el pasado domingo ante Oakland, José Abreu logró otro partido efectivo en el cual supo dar conexiones eficientes en momentos de responsabilidad y fue muy importante para la victoria de los Astros sobre los Angelinos 5×2.
Como ya mencionamos en este sitio, en la baja de la segunda entrada: «Ya en conteo de tres y dos, hizo un buen contacto ante una recta alta de 95.2 MPH y tras un impacto de 98.3 millas por hora llevó la pelota de línea por la misma banda derecha a una distancia de 280 pies, suficiente para que Tucker anotara desde tercera la carrera del empate tras un excelente corring y posterior deslizamiento.«
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Luego de ese fly de sacrificio con el que puso el choque igualado a uno, Abreu falló en par de oportunidades, hasta que en la baja de la octava, nuevamente con Tucker en posición anotadora y en conteo de dos strikes y una bola, impactó con violencia una recta cortada de 83 millas al mismo centro y la mandó de aire contra la cerca entre los jardines izquierdo y central por la marca de 366 pies del Minute Maid Park.
La conexión salió proyectada a 107.9 MPH y llegó a una distancia ESTIMADA de 382 pies, pues dio en la parte superior de la cerca. Esta fue la segunda ocasión en el choque en el que Abreu estuvo a punto de sacar la pelota del estadio, la primera, en la propia segunda entrada, cuando la sacó de foul por la banda derecha.
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Para Abreu fue su empujada número 22 de la temporada y la 885 de su carrera; además, la quinta en sus últimos siete partidos.
El ídolo de Mal Tiempo elevó su average a .213, producto de 44 hits en 207 turnos. De esos indiscutibles nueve han sido extrabases, ocho dobles y un jonrón; suma 15 anotadas, 16 boletos, 51 ponches y tres elevados de sacrificio. De por vida llegó a 1489 imparables, 311 dobles, 571 extrabases.