Por Guillermo Sánchez
El día de ayer comenzaba una serie de cuatro compromisos entre Angeles Dodgers y Chicago Cubs en Wrigley Field de Illinois, ese juego resultaría victoriosa la visita con resultado de 6×2 con una sólida actuación de su jardinero derecho, James Outman, quien sacó dos vuelacercas e impulsó cinco carreras de su club.
La tarde de hoy abrían la segunda tanda con el mexicano Julio Urías por Dodgers y el zurdo Drew Smyly por Cubs, uno para seguir la senda del triunfo, otro para hacer respetar la casa, ambos con panoramas diferentes, el primero venía de ser derrotado y el segundo con la dulzura de conquistar su primera victoria, lo que ninguno sabía es que sería una tarde recordada por los fanáticos.
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«El Culichi» sería castigado en 3.1 entradas de labor, recibiría cinco carreras (dos en el primero, una en el segundo y dos más en el tercero), entre ellas un «Back To Back» de su ex compañero Cody Bellinger y Trea Mancini en el inning tres.
El primero un estacazo de 376 pies, que salió despedido a 96.2 MPH tras una recta de más de 96.1 MPH en conteo de 2-2 y dos outs.
Y el otro minutos después tras un cambio a poco más de 84 MPH en el centro de la zona de poder que registró una rapidez de 100.9 MPH y viajó 368 pies de distancia.
Por su parte, Smyly lució sólido, al punto que hasta la alta del 8vo episodio estaba lanzando JUEGO PERFECTO, una proeza que se vería rota por un batazo realmente absurdo del jardinero David Peralta, bueno, más absurdo se vio el propio equipo de Chicago.
En el octavo inning el venezolano conectó una curva de nudillos a 76 MPH, un rodado realmente suave (32.9 MPH) hacia el lanzador, tanto Smyly como el receptor Yan Gomes en su afán de buscar la bola chocaron de frente y cayeron al suelo dando la oportunidad de que el jardinero llegara a la inicial y romper la mágica tarde.
Esto permitió que se embasara y se perdiera la maravillosa tarde en Chicago, una tarde que será recordada en la historia de muchos fanáticos. Al final el juego cerró con marcador de 13 carreras por cero, con 17 hits para los locales y solo uno para la visita. ¡Lamentable!
¿Habías visto una manera tan absurda de romper un Juego Perfecto?