Por Daniel de Malas / swingcompleto@gmail.com
Los Yankees de Nueva York (11-10) necesitaron entradas extras para doblegar a los Kansas City Royals (7-15) con pizarra final de 7 carreras por 6, tras 10 entradas de un partido donde los pitchers de los ganadores repartieron 20 ponches.
El juego significó récord negativo para el joven slugger cubano Jorge Soler, que igualó con José Canseco como los únicos dos antillanos en esta categoría para el olvido.
Soler vino a batear 5 veces y las 5 veces se ponchó, dos de ellas con hombres en posición anotadora.
5 ponches es la marca actual para un juego de 9 entradas en las Grandes Ligas.
Para el gigantón habanero la actuación de esta tarde empeoró sus frecuencias ofensivas de la temporada a 214/275/452 (AVE/OBP/SLG), con 18 imparables, 10 extrabases (5 dobles y 5 jonrones), 8 carreras anotadas, 14 impulsadas, 36 ponches y 7 bases por bolas, en 84 oportunidades con el madero y 22 partidos jugados.
Soler igualó a Canseco, que el 16 de julio de 1997 enfrentó coincidentemente a los Royals y se tomó 5 ponches, mientras jugaba por los Atléticos de Oakland.
Canseco es, de hecho, el cubano con más ponches en la historia de la MLB, con 1942 chocolates en 17 años y 7057 veces al bate.
Soler es el segundo bateador del año con el Sombrero de Platino (Golden Sombrero) y es el primer jugador de Kansas City con 5 ponches desde Salvador Pérez en agosto del año pasado.
Para colmo de males Soler, que ha empezado bien con el bateo de largometraje, es el líder en este instante de toda la MLB, con 36 ponches en el 2019.
Un bateador con 5 cafetazos en un mismo partido es la marca actual para un partido de 9 entradas y ha ocurrido 86 veces, mientras que en 8 oportunidades (todas en extrainnings) algún bateador se ha ponchado 6 veces.
En este juego, y hablando de ponches, Aroldis Chapman tiró una entrada sin problemas, con un hit tolerado y dos bateadores viendo pasar los strikes.
Chapman ahora promedio 2.25 carreras limpias por juego completo.