Por Alexander García Milián
Ya hace días vengo cocinando la idea; la noticia paso, hiso su ruido leve pero hasta ahí. El INDER, anunció mejoras respecto al sistema de contrataciones; – ¿mejoras?- me pregunto y crece la incertidumbre; sí, pues es algo que para el año anterior debía aportar ya varios puntos positivos; pero solo en lucha- pues es el deporte con mayor impacto- quizás el único, solo en lucha se puede hablar de crecimiento, de aumento de calidad; de hegemonía diría.
La cifra de contrataciones en unos cuatro años, ronda las 75; y al mirar la proporción, nos convencemos que se trata de una décima parte quizás para comparar con algo, una décima parte de la cantidad que podría tenerse a estas alturas.
Para ahondar en el tema, marcamos las cuestiones vinculadas a la calidad de las ligas o torneos donde juegan los atletas contratados; este factor es tal vez la cuestión más contradictoria de todas.
Ahora, comenzando por deportes; el baloncesto, la Liga de Argentina es un referente con algo de respeto, pero no el la salvadoreña, a donde van el mayor número de jugadores; miren a Justiz, luego de varias temporadas en tierras gauchas llegó a la Liga Española y está luciendo; algo que bien pudieran emular Mencía, Karel Guzmán y Jasiel Rivero.
En el caso del voleibol, Turquía y Grecia se muestran como las opciones más “quemadas” y valga el apelativo; y ¿Qué son esas ligas?; son de las más modestas de Europa al lado de Italia, Rusia, Polonia; incluso en el área, Brasil y Argentina están a la mano.
En el béisbol, solo Japón saca la cara, pero antes de Colombia, Nicaragua y Panamá, hay otros eventos con algo más de categoría para enviar a muchos de los peloteros de nivel medio que tenemos. Esperemos que el acuerdo Cuba- MLB proceda de a todas, que las cosas se manejen bien y se empiece a mejorar.
Entonces llegar a otras competiciones pienso no sea un problema, liga de Korea, KBO, de Taipéi, o las Ligas Invernales del Caribe para su próxima edición.
Ya se está tratando de recomponer el maltrecho panorama que hoy vemos, mediante acciones coordinadas en varias disciplinas, como el balonmano, por ser el ejemplo de más peso. Sí, los atletas contratados en ligas europeas ya pueden jugar con la Isla y el diapasón comienza a expandirse para los otros practicantes de este deporte luego de Barranquilla.
En resumen, las contrataciones no es una mala idea, es lo más idóneo en un momento donde el deporte toca pauta nunca antes vista en materia de mercado y estar atrás no parece una opción. Pero las cosas han de hacerse bien, sin miedo, de una vez y por todas, dejemos las palabras a un lado y vayamos a los hechos.