En el trono de la paciencia y el tesón: Rangel Ravelo ¿Llegó su hora?

Por Alexander García Milián Ahora en este punto, al instante de reflexionar, creo como nunca que ser justo es la disyuntiva más difícil a la cual sometemos nuestro criterio. La historia está llena de grandes ejemplos de injusticia; desde Dantes y Jean Vaillan en el Conde de Montecristo y Los Miserables, respectivamente; hasta la prisión […]

Por Alexander García Milián

Ahora en este punto, al instante de reflexionar, creo como nunca que ser justo es la disyuntiva más difícil a la cual sometemos nuestro criterio.

La historia está llena de grandes ejemplos de injusticia; desde Dantes y Jean Vaillan en el Conde de Montecristo y Los Miserables, respectivamente; hasta la prisión de Dreyfus o el mismo caso de Mandela.

En el deporte, la cosa nos es diferente, el asunto quizás de un modo sutil, se torna más candente; sí entonces vamos al béisbol, aquí paramos y le ponemos cabeza a la cuestión.

Cuando supe la noticia del debut en Grandes Ligas, del cubano Rangel Ravelo, me emocioné como hacía ratos no lo hacía y no es algo de mera palabrería.

El habanero se convirtió en el cubano número 25 en debutar esta temporada en la Gran Carpa y no le fue mal, pues conectó de hit en su primera visita a la MLB, no defraudó y lo que parecía estar al doblar de la esquina fue pura realidad.

Entonces recordé a Rangel en la pasada Serie del Caribe, vistiendo el uniforme de los Cardenales de Lara. En esos días de febrero, pocos recordaron su efímera vida como industrialista, sus varios años destacando en Ligas Menores con San Luis- ya el año pasado conto con números suficientes para marcar- ; menos aún que en ese elenco venezolano, el caribeño es un ícono desde hace par de campañas.

Ravelo que comenzó en las Menores desde el 2010, lleno, lleno de paciencia y mucho tesón.

Al pensar en Rangel, pensé en Mustelier, en su excelente rendimiento con los Yankees en doble A y triple A, en como cuando salió Alex Rodríguez, Cashman trajo a Chase Headley, con Rodney bateando, ampliamente, por encima de 300.

Sigo pensando y trato de ser más directo; también fueron injustos en su momento con Adonis García, también con los Yankees, pero al final los Bravos le dieron la buena; luego, todo fue más de lo mismo.

Ahora, incluso con Yordan Álvarez, ¿Desde cuándo no podía haber llegado?; son solo meros ejemplos; unos ven la luz, otros se quedan con las ganas, quizás sea apresurado, pero Rangel merecía ya, desde el año pasado estar en el roster de 40.

La paciencia juega con el talento de estos muchachos, Ravelo, de hecho, regresó a las Menores, después de 4 partidos en la Gran Carpa.

De grandes injusticias, de injusticias a medias, de llegar, de no hacerlo, de mantenerse, tal vez por aquí vaya la cosa y sigo creyendo en el talento de Ravelo y en su potencial, que quizás ya sea su hora.

Nos vemos a la vuelta.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *