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La vida personal de varios atletas que hoy están en la cima de sus respectivos deportes fue tormentosa en el pasado y los ejemplos sobran. El boxeador cubano Erislandy Álvarez es uno de estos casos. La situación del cienfueguero llegó a un límite tal que estuvo a punto de terminar tras las rejas o perecer en una riña callejera.
Así lo contó sin censura el pugilista en el podcast Pidiendo Pista que salió a la luz pública en días recientes, en una exclusiva que otorgó a la periodista Lilian Cid. Las revelaciones del protagonista fueron varias, pero una en específico llamó la atención.
El boxeador cubano Erislandy Álvarez contó la verdad Sin tapujos
Erislandy Álvarez aceptó en dicho espacio que estuvo envuelto en una conducta marginal bastante delicada, que trastocó por completo la rutina de su existencia. El atleta reveló que la tranquilidad en sus días fue una imposibilidad, pues los problemas eran una constante y un riesgo que asumió a pesar de las consecuencias que le pudo traer.
«Yo estaba descarrilado por completo. Si no me concentro estuviera preso hoy en día con mi hermano. Tuve tiempos en los que tenía que salir a la calle con un a*ma blanca y eso ni recordarlo quiero. Estaba durmiendo incómodo en la cama pensando que me podían hacer algo«, dijo el boxeador cubano en la conversación que se desarrolló en el espacio El Arca de Noé en la capital de la nación.
Erislandy Álvarez rememoró los tiempos de antaño y las críticas que muchos esgrimieron en su contra. El aludido señaló que poco a poco salió de aquella realidad y el pugilismo tuvo un papel primordial en ese radical cambio.
«Hoy me siento contento porque cuando salgo a la calle me llaman campeón y quieren una foto conmigo. Ya no me miran como antes que me estaban velando y si no te meto yo primero, porque mi madre no va a llorar. Que llore la tuya antes que llore la mía. Es lo que siempre hemos pensado mi hermano y yo. Pero bueno, gracias a Dios decidí encarrilarme«, expresó el entrevistado a Lilian Cid.
Penosos antecedentes
La historia del deporte cubano posee tristes ejemplos de luminarias que apagaron su brillo prematuramente, debido a escándalos o peleas fuera del ámbito de la actividad del músculo. Algunos de esos episodios culminaron con el fallecimiento del atleta, debido a agresiones que terminaron de la peor manera.
Erislandy Álvarez escapó a tiempo de esa convulsa existencia y el boxeo se convirtió en su tabla de salvación. El presente es completamente diferente para el cienfueguero y sus preseas en campeonatos mundiales y Juegos Olímpicos son la prueba de un talento que encontró la vía de escape al laberinto que se le presentó.
El titular de la justa cuatrienal de París 2024 está en el camino hacia la gloria y sus descollantes actuaciones parecen ser la llave rumbo a este empeño. Pero, para arribar al presente se vio obligado a cerrar las puertas a los fantasmas del ayer.
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Cronista del Universo Atlético y Analista de Béisbol con experiencia en varios sitios web. Licenciado en Cultura Física con 17 años como entrenador deportivo. Desde marzo de 2023, miembro del equipo editorial de Swing Completo para la cobertura de Grandes Ligas y Pelota Cubana.