ESPECTACULAR: Savannah Bananas vencieron en Hartford

Los Savannah Bananas lograron victoria sobre su similar de Party Animals en el  Dunkin’ Park de los Hartford Yard Goats (clase AA de los Colorado Rockies) como parte de su Gira Mundial este lunes 14 de agosto. En un emotivo encuentro, los Bananas lograron superar un déficit de 4-0 para vencer finalmente 5-4 en Showdown. Para […]

Para comenzar, vale aclarar que los Savannah Bananas, versión beisbolera de los Harlem Globetrotters, no juegan béisbol, sino BananaBall, y que las reglas, aunque similares, tienen ciertas peculiaridades que lo hacen más entretenido para los fans.

Aunque el juego parece no tomarse en serio por las acrobacias, trucos y locuras que se ven, los jugadores tienen grandees habilidades. Muchos de ellos han tenido carreras profesionales, incluso en las mayores, como es el caso del legendario Bill Lee.

Hay un conjunto de reglas que difieren del béisbol como lo conocemos, y acá dejamos una lista:

Número 1

No se gana por carreras: Cada inning es como un asalto de boxeo o un set de tenis. El equipo que haga más carreras en esa entrada será el ganador del punto correspondiente. Si el home club logra una carrera más que el visitador, el inning termina aunque no hayan sido realizados los tres outs. Por tanto lo que vale son los puntos. No obstante, cada carrera del noveno capítulo cuenta como un punto.

Número 2

No existe la base por bolas: Una vez que un jugador logra el cuarto lanzamiento malo, comienza un sprint en busca de cuántas bases pueda lograr. Puede llegar hasta segunda o tercera base, pues solamente estará a riesgo de ser puesto out una vez que los restantes siete fildeadores hagan contacto con la pelota. Tanto los Bananas como los Party Animals se han especializado tanto que los bateadores solamente llegan hasta la segunda base y en ocasiones son puestos out en el intento.

Número 3

No existe el toque de bola: El jugador que intente tocar la bola es automáticamente expulsado del encuentro.

Numero 4

No se puede pedir tiempo: El bateador que se salga de la caja de bateo es automáticamente sancionado con un strike.

Número 5

No existen los extra-innings: Los juegos son pactados a nueve entradas o dos horas. Si se alcanzan las dos horas, debe terminarse la entrada. De haber empate, se realiza un Showdown, en el que se enfrenta un bateador contra un lanzador y solamente un defensor. El primer equipo que fabrique anotación en estas circunstancias gana. De lograr cada uno el cero, se aplica un segundo Showdown sin defensores.

Número 6

Los fans también juegan: Cada bola bateada de foul hacia las gradas es considerada viva y en juego, si un fan la captura de aire, el bateador es decretado out.

Número 7

No existen las visitas a la lomita: Ningún manager, entrenador o jugador puede pedir tiempo en la entrada para hablar con el lanzador.

Número 8

Solamente un desafío: Cada equipo tiene derecho a apelar solamente una jugada en todo el partido. Los fans deben elegir a un delegado que también tendrá derecho a apelar una decisión arbitral que no le parezca justa.

Número 9

Se lleva una anotación con los tricks: Los tricks son el plato fuerte del Banana Ball. Hacer una pirueta antes de atrapar o lanzar una pelota, acostarse en el césped para capturar un batazo, y otros son contabilizadas y llevadas a la anotación.

El encuentro comenzó mal para los Bananas que perdieron los puntos de los cuatro primeros episodios al no anotar en ninguno y permitir una carrera en el primero, el segundo y el cuarto, y dos en el tercero. Los Party Animals incluso lograron un enorme cuadrangular solitario por la banda derecha.

En el quinto, las cosas parecieron ponerse peor para los Savannah Bananas, al permitir otro cuadrangular, este con uno en base, por la pradera izquierda. Pero resurgieron de sus cenizas y dejaron al campo en la entrada a sus rivales al fabricar tres, coronadas por un doblete.

En la sexta, se acercaron en el puntaje 4-2 cuando lograron el cero y fabricaron otra anotación. Sin embargo, el séptimo inning fue de cero puntos para ambos, pues ninguno de los dos conjuntos logró pisar la goma. En el octavo, los Bananas volvieron a dejar al campo a sus rivales al lograr una anotación, para poner el marcador cuatro puntos por tres.

Llegó la novena entrada, cinco minutos luego de terminadas las dos horas, donde cada punto contaba como carrera. Luego de dar el cero, los Bananas empataron el marcador, pero no pudieron lograr el walk-off y todo se definiría en el Showdown.

En la primera oportunidad, los Bananas lograron dar el cero al retirar al bateador con elevado al pitcher. No obstante, se quedaron con las ganas cuando su hombre en turno elevó a manos del único defensor de los Party Animals, ubicado poco detrás del segundo cojín.

En la segunda oportunidad las cosas se complicaban, pues solamente el lanzador y el receptor estaban a la defensa. Los Bananas lograron retirar el episodio con ponche, dejando servida la mesa para el final del encuentro.

En este Showdown, el bateador de Savannah conectó una rolata por territorio del torpedero, mandando la pelota hacia lo profundo de la grama del jardín izquierdo. Esto le posibilitó dar la vuelta al cuadro antes de que el lanzador corriera hacia lo profundo del bosque, y lanzara hacia el plato. Así se decretó el triunfo de los Bananas.

En el partido, los Party Animals lograron llegar a segunda base por boleto dos veces, mientras que los Bananas lo hacían una vez y eran retirados en dos ocasiones. Un fan capturó una pelota de foul en la novena entrada ante un bateador de los Bananas.

Se vieron otras cosas curiosas, como bailes, interacciones de los jugadores ante la música y celebraciones burlescas por cada éxito colectivo. La música solamente se detuvo cuando un lanzador de los Bananas hablando con un micrófono por la ampliación local jugó a piedra-papel-tijera con un bateador rival: si ganaba el lanzador, el batedor tenía que pararse en el cajón contrario, si ganaba el bateador, el lanzador tenía que decirle qué lanzamiento iba a realizar. El turno terminó con una slider que golpeó al bateador y el lanzador diciéndole que había sido intencional.

Los Bananas presentaron además a un lanzador con zancos, otro con un casco de astronauta, y un barril que rondaba cerca de un segunda base vestido como payaso.

Igualmente, hubo burlas y celebraciones todo el tiempo entre uno y otro equipo, algo que molestaría a algunos puritanos y provocaría no pocos pelotazos en un encuentro de grandes ligas. 

Sin embargo, los grandes ganadores fueron los fans que abarrotaron el estadio (las entradas salieron a la venta en abril y se agotaron en apenas unas horas). Se disfrutó de un espectáculo épico, con maniobras propias de un circo o una comedia, que deleitaron a los presentes.

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