Por Swing Completo / contacts@swingcompleto.com
El exlanzador de los equipos de la Isla de la Juventud, Carlos Yanes, llegó a territorio de los Estados Unidos en las últimas horas, según le informaron a Swing Completo fuentes cercanas al otrora pícher pinero.
La información ofrecida a nuestra redacción web indicó que el conocido exatleta completó la travesía desde Nicaragua junto a su esposa y se unió a ese grupo de peloteros cubanos que, después del retiro, decidieron comenzar una nueva vida en el «pais de las oportunidades».
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Yanes se convirtió en el unicó serpentinero del béisbol cubano con 28 temporadas de actuación, en las que consiguió 239 victorias y logró el récord absoluto de participaciones con 714 juegos lanzados.
La salida de la Isla del oriundo de Cienfuegos y pinero por adopción sorprendió, luego de escuchar sus declaraciones al colega Yasel Porto, en las que mostró un profundo sentido de pertenencia por el municipio especial que lo acogió y lo colocó en lo más alto de la pelota cubana.
«Me dijeron que tenían hasta una casa para mí si decidía quedarme en La Habana con el objetivo de lanzar con Industriales», le confesó a Yasel. También explicó que: «No quería renunciar al equipo con el que había lanzado toda mi vida. Es real que con Industriales, Santiago, Pinar del Río o Villa Clara hubiera logrado más victorias que con la Isla, y hoy tendría posiblemente casi 300, pero yo no pienso en eso ni en que nunca pude ser campeón por quedarme donde estaba».
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Para Carlos los beneficios materiales eran intrascendentes. Sentía un fuerte compromiso con sus compañeros y la afición del conjunto y nunca los abandonó. «Yo era muy importante en el equipo de Isla de la Juventud y de haberme ido de allí posiblemente no hubiesen tenido parte de los resultados que llegaron después. Me sentía contento con mi púbico, mis compañeros de equipo, con el lugar donde vivo desde que tenía 9 años. No tenía el valor de irme de aquí», confesó.
Sin embargo, en una entrevista ofrecida a un medio deportivo cubano en el 2021, Yanes conversó sobre su etapa después de abandonar la práctiva activa de la disciplina deportiva que lo acompañó durante casi 30 en el primer nivel de la pelota cubana: “Es como si al jubilarte olvidaran lo que hiciste”.
El diestro fue protagonista de otro capítulo triste de un libro que no parece tener final. Libro escrito con decepciones, en el que olvidan a los protagonistas de la pelota cubana, esos que llenaron estadios y colmaron de gloria a la Mayor de las Antillas.
Carlos Yanes se retiró en el 2012, en su querido Cristóbal Labra. Mucho tardó en darle un giro a su vida. Quizás en tierras norteamericanas esté a tiempo de compartir sus conociemientos. Quizás por primera vez vea recompensado económicamente todo lo que aprendió en su carrera deportiva.
