Por SwingCompleto / contacto@swingcompleto.com
La 61 Serie Nacional todavía está lejos de la voz de playball y desde ya comienzan a darse situaciones inverosímiles relacionadas con la falta de libertades para los periodistas, incluso de los propios medios oficialistas.
La emisora radial COCO ha sido el órgano de prensa más ligado a Industriales durante décadas y el narrador-comentarista de dicha estación, Andy Vargas, ha sido considerado como parte indispensable de los Leones por una labor de más de 20 años en los que ganó gran popularidad entre jugadores y aficionados.
Pero ni siquiera el lazo bien estrecho de este medio y del periodista insignia de los azules impidió que se produjera un hecho totalmente criticable tras el inicio de los entrenamientos de la preselección comandada por Guillermo Carmona.
A Andy se le privó el acceso al estadio Santiago “Changa” Mederos, instalación ubicada en la Ciudad Deportiva del municipio Cerro y donde se prepara una parte del concentrado industrialista.
Desde el año pasado con la justificación de la pandemia se establecieron algunos protocolos para realizar trabajos periodísticos desde la fase pretemporada, un proceso bastante burocrático en el que para entrevistar o simplemente coincidir en tiempo y espacio con jugadores y entrenadores de la selección capitalina había que pedir un permiso especial al jefe de prensa del INDER de La Habana. Éste lo concedería en caso que sus superiores estuvieran de acuerdo con el periodista y el medio de prensa que solicitaba su asistencia.
Con la flexibilización de las leyes en los últimos días, no parece ser la protección de salud la razón fundamental para restringir en extremo la presencia de periodistas en las zonas de entrenamiento.
El objetivo de esta medida tiene que ver con el control sobre el trabajo de prensa, el cual desde hace par de años se ha intensificado para evitar que se filtren informaciones que pueden generar polémica a través de las redes sociales.
Vale recordar que solo integrantes de la prensa oficialista tienen permitido obtener credenciales para la cobertura de los eventos deportivos en la Isla, incluyendo lo concerniente a la Serie Nacional.
Lo que resulta inaudito es que alguien como Andy, con la experiencia y resultados suficientes para ser conocido en todos los espacios beisboleros de la capital haya tenido que volver a su emisora sin cumplir su objetivo.
En la propia COCO se comentó sobre el particular y varios fanáticos se hicieron eco de lo sucedido a través de las redes sociales.
Ciertamente si existen ciertas razones de peso que imposibilitan que hasta la prensa más confiable y conocida tenga contacto directo con el equipo al que se debe profesionalmente, lo más justo es que exista una explicación convincente que en realidad no se produjo.
A lo largo de los años se ha hecho un hábito que Vargas realice reportajes desde el comienzo mismo de la preparación de los doce veces campeones nacionales que luego son compartidos para la millonaria fanaticada industrialista. En esta oportunidad fue diferente y ojalá este incidente lamentable no provoque una indignación duradera en el carismático narrador de más de 60 años de edad y voz principal desde hace casi una década del programa nocturno “Tribuna Deportiva”.