Aunque Houston Astros comenzó perdiendo el Juego 1 de la Wild Card Series contra Detroit Tigers este lunes 1 de octubre, Jeremy Peña demostró su liderazgo dentro del terreno, al levantar el ánimo de su equipo con una estupenda atrapada en el campocorto que los salvó de que les anotaran otra carrera en el Minute Maid Park.
Cuando el dominicano ganó su Guante de Oro en su año de debut en 2022, a muchos les sorprendió que un novato mostrara tanta soltura y seguridad con su defensa, pero a medida que han transcurrido las temporadas, el pelotero de 27 años se ha establecido como un referente en la posición.
Luego de fabricar tres carreras en la alta del segundo inning, los dirigidos por AJ Hinch asediaron de nuevo al abridor Framber Valdez en la tercera, cuando pusieron hombre en tercera base con dos outs. En ese momento, Spencer Tolkerson tuvo la oportunidad de impulsar carrera, pero no contaba con el fildeo de Jeremy Peña.
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El bateador de Detroit Tigers conectó una línea que parecía internarse en el jardín izquierdo, pero el parador en corto de los Siderales nunca se rindió, se desplazó hacia la grama entre su posición y la tercera base y se lanzó con estilo para capturar la pelota.
Inmediatamente el público celebró la extraordinaria jugada de Jeremy Peña, quien salvó a su equipo de caer por cuatro carreras en el primer tercio del compromiso. Además, esa jugada ayudó a que su equipo levantara la cabeza en una instancia que están acostumbrados a sortear.
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La experiencia de Jeremy Peña en Postemporada
La historia de Jeremy Peña en Grandes Ligas está ligada, innegablemente, a los Playoffs, tomando en cuenta su recordada y destacada actuación de 2022 que catapultó a Houston Astros a ganar la Serie Mundial ante Philadelphia Phillies.
En ese año, el infielder dominicano ganó el MVP de la Serie de Campeonato ante New York Yankees y también fue el Jugador Más Valioso en la lucha por el título.
A Jeremy Peña no le pesó la presión y contra la tropa del Bronx bateó para .353 con par de jonrones, cuatro impulsadas y tres anotadas en cuatro juegos. Y por si fuese poco, contra Philadelphia Phillies ligó para .400, al dar diez imparables en seis encuentros, en los que destacó por tres extrabases, cinco carreras anotadas y trío de rayitas remolcadas.
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