Adrián Bonilla
El camarero cubano de Los Angeles Dodgers, Miguel Vargas, está dando una nueva mejor versión de sus capacidades ofensivas, y la acción en su primer turno vs Pittsburgh Pirates este martes lo certifica.
Vargas asumió esta jornada como quinto bate y defensivamente como vigilante de la segunda base.
El nacido en La Habana demostró sus habilidades con el madero al conectar la bola hacia su mano contraria y dejarla caer entre los jardines de la pradera derecha y la primera almohadilla.
Esta elevación perfecta de pelota permitió a sus compañeros Freddie Freeman y Jeyson Heyward anotar en carreras las primeras dos del juego.
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En el montículo bucanero estaba su coterráneo Johan Oviedo, a lo que evidentemente gano el duelo cubano en su primer round del encuentro.
Miguel Vargas sonó a Oviedo estando en cuenta desfavorable de cero bolas y un strike, además, el electrónico marcaba dos outs.
Sin embargo, el infielder pudo hacer devolver la bola apenas a 66.3 millas por hora a un lanzamiento en slider cerrado a 90 millas y finalmente se convirtió en su quinto doble la zafra.
Con esta conexión, Vargas pudo alcanzar las seis carreras impulsadas en la temporada y fijó promedio de .226 hasta el momento.
Miguel también ha cosechado 14 hits, cinco dobletes y un triple en 62 turnos al bate.