Aunque la producción constante sea un punto por el cual, Jorge Soler, se mantiene en constante trabajo para mejorarlo, es innegable que el ser oportuno es una de sus mayores y mejores virtudes.
Tras su llegada a San Francisco Giants, el antillano se plantó como pieza importante dentro del lineup de los de la Bahía. Precisamente, durante la jornada de este jueves 25 de julio, Jorge Soler dio un abrebocas de lo que es capaz de hacer cuando más lo necesitan y en situaciones cruciales.
El «Dodger Stadium», hogar de la tanda de Los Angeles, recibió nuevamente al conjunto de San Francisco, para un choque en donde las conexiones eficaces fueron las protagonistas del día.
Jorge Soler, alineó como primero en el orden y bateador designado. Casi finalizando el encuentro, su poder dijo presente de forma tajante.
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Jorge Soler le puso swing al duelo frente a Los Angeles Dodgers
Blake Treinen, se apersonó al morrito por los de casa, con el fin de salir lo más airoso posible de la octava entrada, debido a la poca diferencia de ventaja que tenían.
Por su parte, Soler compareció al home plate con dos outs, hombre en la intermedia y todas las posibilidades de igualar las acciones que comandó Dodgers hasta ese momento 4×3.
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En cuenta desfavorable de 0-2, Jorge Soler hizo contacto con un slider a 83 MPH exactas. Con el impacto dirigió la esférica entre left/center field de forma ideal para darle el chance necesario a su compañero que corría en la segunda base. Este partió sin frenos y llegó a la registradora con lo que fue la rayita número cuatro para empatar la pizarra. Mientras, el cubano se frenó en la inicial satisfecho de lo que había aportado para su equipo.
Esta es la carrera remolcada número 36 del oriundo de la Mayor de las Antillas y su imparable 73. El promedio lo llevó a. 224 con miras de continuar elevándolo.
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