Por Aliet Arzola Lima
El karateca cubano Ariel Torres, quien representa a Estados Unidos, ganó la presea de bronce en el concurso de katá de los Juegos Olímpicos de Tokio, luego de derrotar en la definición de medallas al multi laureado venezolano Antonio José Díaz, ocho veces medallistas mundial.
Torres, número diez del ranking mundial, desbancó en la discusión del bronce a Díaz con puntuación de 26.72, fruto de 18.62 unidades de rendimiento técnico y 8.10 por el desempeño del atleta. El venezolano, por su parte, terminó con récord de 26.34 y quedó fuera del podio en la primera presentación del karate en Juegos Olímpicos.
El cubano-americano superó la ronda de eliminación con calificaciones de 26.40, 25.98 y 26.19, con las cuales se ubicó por detrás del estelar español Damián Quintero, líder del escalafón mundial. Ellos dos, junto al sudcoreano Heejun Park, avanzaron a la siguiente fase, en la que estaba en juego el boleto a la discusión de medallas.
Ya en esta ronda decisiva, Torres volvió a culminar segundo 26.46 unidades por 27.28 de Quintero. Aunque ese resultado le garantizaba un puesto en la lucha por el bronce, el karateca de origen caribeño no tenía nada seguro, pues su rival en la lucha por las medallas sería el venezolano Antonio José Díaz, doble titular mundial y verdugo del propio Torres en los Juegos Panamericanos de Lima hace dos años.
Pero la vida le dio revancha al joven de 23 años, quien dio una excelente demostración para derrotar al experimentado (41 años) especialista sudamericano. Con esta victoria, Ariel Torres pasará a la historia como el primer medallista de Estados Unidos en la historia del karate en Juegos Olímpicos.
Torres nació en Pinar del Río en 1997, pero a los cuatro años su familia emigró a Estados Unidos, donde se establecieron en Newark, New Jersey, para después mudarse a Miami. Comenzó a practicar el karate a los seis años por sugerencia de los médicos (decían que era muy hiperactivo), por lo que toda su formación deportiva ha sido en el país norteño.
La historia de Torres ha estado llena de contratiempos. Según ha comentado en diversas entrevistas, no olvida como se iba con su padre a los semáforos de Hialeah para pedir donaciones y poder costear su participación en competencias de karate.
“Tenía un frasco y la gente daba un dólar, 25 centavos, lo que pudiera. Lo hacíamos durante horas y horas a la semana, tratando de acumular el dinero para ir a las competencias. Hubo momentos en que ni siquiera podíamos comer porque dedicábamos todo el dinero hacia el karate, así que fue difícil”, reconoció Torres.
El karateca es uno de los 22 atletas nacidos en la Isla que compiten por otras naciones en los Juegos de Tokio y el tercero que consigue una medalla, luego de Pedro Pablo Pichardo, en el triple salto bajo la bandera de Portugal, y el boxeador Loren Alfonso Domínguez, bronce en la división de 81 kilogramos.
Todavía hay otros tres deportistas cubanos que compiten por otros países con opciones de medallas en los Juegos de Tokio. Hablamos de Raúl Valdés, uno de los lanzadores de República Dominicana en el béisbol, quien discutirá el bronce contra Corea del Sur. También por el tercer puesto irá el voleibolista Yoandy Leal con Brasil (vs. Argentina).
Por su parte, el luchador Abraham Conyedo, representante de Italia, se mantiene con vida en el repechaje de la división de 97 kilogramos en la lucha libre, por lo que puede aspirar a un bronce.
Tampoco podemos olvidar al abanderado de la delegación de Estados Unidos en Tokio, el pelotero Eddy Álvarez, quien discutirá el oro del béisbol contra Japón. Aunque no nació en Cuba, los padres de Eddy son emigrantes cubanos.