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Peloteros de Industriales han protagonizado grandes momentos en la historia del beisbol cubano. Hombres como Lázaro Vargas, Armando Capiró, Pedro Medina, Juan Padilla, Lázaro de la Torre, Lázaro Valle, Alexander Malleta, entre otros tantos, llenaron de gloria la camiseta azul. Sin embargo, uno de estos episodios resalta por encima de todos los demás.
Aquel 19 de enero de 1986 parece ayer hasta para los más jóvenes seguidores del beisbol cubano que no vivieron ese momento, pero lo disfrutaron gracias a los archivos. Rogelio García abalanzándose sobre la lomita del abarrotado Latinoamericano y Agustín Marquetti destrozando aquel incómodo tenedor del ‘Ciclón Vueltabajero’.
La bola cayó rozando la segunda sesión de gradas. La alegría era tal que el público se metió en el terreno antes de que el veterano cruzara la primera base. Hasta el pinareño Giraldo González reverenció al gigante Marquetti que, aún incrédulo, flotaba sobre la arcilla del Coloso del Cerro.
Anécdota inédita sobre el día inmortal
Muchas historias rondan ese día que parece inmortal para los amantes de Industriales. Sin embargo, uno de los protagonistas de aquel título, Lázaro Vargas, contó recientemente una anécdota poco conocida de ese desafío final.
«Yo estaba en la molotera, en el shortstop, ahí mismo estaba yo. Cuando se formó todo ese lío ahí, estaba yo metido. Es que las personas no pueden imaginarse, yo no puedo describirte la alegría tan grande que sentimos aquel partido», dijo Lázaro Vargas en intercambio con Swing Completo vía online refiriéndose a aquel mágico momento tras el jonrón de Marquetti a Rogelio García en la final de 1986 entre Industriales y Vegueros.
Todavía quedan las imágenes del enorme batazo por el jardín derecho que hizo campeón a Los Leones. El público se lanzó al terreno al punto de que dificultaron el corrido de las bases a Marquetti. Todos querían abrazar al veterano, al héroe.
«Yo te puedo hacer una anécdota de aquel día que Marquetti y yo la recordamos con alegría», nos cuenta Vargas casi 40 años después.
«Me acuerdo que José Modesto Darcourt decía: ‘Este juego lo va a decidir o Vargas o Marquetti’, mira que responsabilidad aquella. Y yo le decía: ‘Tú tienes que estar loco'». Recordemos que aquel conjunto azul tenía en sus filas a nombres como Agustín Marquetti, Pedro Medina, Javier Méndez, Juan Padilla y otros estelares del beisbol cubano.
«Yo me acuerdo que, como en el noveno inning, yo le di (a la bola) para que se acabara el juego. Después, llego al banco y me dice Marquetti: ‘Ya viste que no eres tú, que voy a ser yo el que decida esto. Entonces, imagínate» rememoró entre risas el histórico antesalista capitalino.
Lázaro Vargas y Agustín Marquetti: Dos inmortales de los Industriales
Pocos peloteros dejaron una huella tan profunda en la afición capitalina como Agustín Marquetti y Vargas.
El icónico dorsal 40 e inicialista azul debutó en la temporada 1965-66. Jugó 22 Series Nacionales de las que ganó tres. Al momento de su retirada en 1987 lideraba a todos los peloteros antillanos en Series jugadas y veces al bate. Segundo en imparables, dobles, extrabases e impulsadas; tercero en carreras anotadas; cuarto en jonrones. Sonó un total de 1935 hits, 279 dobles, 207 jonrones, remolcó 1106 y cerró con average de .288.
Formó los equipos Cuba en seis Mundiales (1969, 1970, 1972, 1973, 1976 y 1978), tres Juegos Panamericanos (1971, 1975, 1979) y otros eventos internacionales.
Por su parte, Vargas fue vital en Industriales en la consecución de tres títulos nacionales (1991-92, 1995-96, 2002-03). Fue bicampeón Olímpico, también ganó dos Juegos Panamericanos (Indianápolis 1987 y La Habana 1991), igual número de Juegos Centroamericanos (1986 y 1993).
Vargas se retiró con average de .317, 2133 sencillos en 6738 veces al bate. Pegó 310 dobles, 50 triples, 108 jonrones, 1065 empujadas y 1109 anotadas.