LO QUE NO VISTE: Gran Slam de Acuña Jr. AMARGÓ a Freddie Freeman en Los Angeles

El béisbol de Grandes Ligas siempre regala momentos para resaltar dentro de la historia, tal y como sucedió con Ronald Acuña Jr. durante la pasada noche del jueves 31 de agosto en el Dodger Stadium, hogar de Freddie Freeman y compañía. Más allá del éxtasis generado en la fanaticada de Atlanta por el jonrón del […]

Más allá del éxtasis generado en la fanaticada de Atlanta por el jonrón del venezolano, dentro del terreno de juego existió cierta competencia, apartando la lógica, que era entre Atlanta Braves y Los Angeles Dodgers.

Cierto grado de rivalidad y presión se instaló en el recinto californiano al reunir a tres de los máximos favoritos para el premio al «Jugador más Valioso» de la temporada 2023.

En efecto, la contienda fue un vendaval de batazos por parte de Ronald Acuña Jr., Mookie Betts y Freddie Freeman.

El venezolano inició la fiesta con un histórico Gran Slam que le permitió establecerse como el único pelotero en toda la historia del béisbol de Grandes Ligas en lograr 30 jonrones y 60 bases robadas en una misma temporada.

Seguidamente, Mookie Betts añadió mas sazón a la disputa y sacudió un jonrón de tres carreras para acercar momentáneamente a los suyos con marcador de 7×4 en la parte baja del quinto episodio.

Para regalar más emoción, el hábil jardinero norteamericano la volvió a desaparecer en el séptimo inning y la brecha se cerró a 8×6 de forma transitoria.

En contraparte, Freeman no pudo demostrar del todo su «amorío» con el madero después de dar solo un hit, y resonar más por el episodio donde demostró su amargura por el Grand Slam de su antiguo compañero, Acuña Jr.

Freeman se congelo con el jonrón de Acuña Jr.

El audiovisual tendencia de la jornada del jueves fue sin duda alguna la reacción del inicialista de Dodgers, Freddie Freeman, quien no mostró cara de «muchos amigos».

Acuña Jr. sonó a Lance Lynn en la apertura del segundo inning con un salvaje batazo que viajó a 110.5mph y aterrizó a 429 pies.

Sin embargo, más allá de los detalles, al momento de la conexión, Freeman volteó a ver la pelota y enseguida cruzó los brazos mientras tiraba un «ojazo» a la cámara que lo apuntaba.

La escena causó gracia entre algunos internautas y otros asumieron que Freeman no se lo tomó muy bien y revivió algunas rencillas del pasado entre ambos.

Esto último, es solo divagar entre rumores sin fundamentos, considerando que ambos peloteros, después de los runrunes de diferencias, descartaron cualquier tipo de impase.

Lo cierto de todo el asunto, es que a nadie le gusta perder, y mucho menos ser la contraparte de una historia que quedará plasmada por los siglos de los siglos.

Sin más, disfrute del Grand Slam y posterior reacción de Freddie Freeman: