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Este sábado 3 de mayo, se dio otra jornada de acción en Major League Baseball y como no podía ser de otra manera, los peloteros cubanos en MLB estuvieron portando el uniforme de sus respectivos equipos, logrando en algunos casos marcas históricas, tanto personales como para los exponetes antillanos que han pasado por las Mayores.
Lourdes Gurriel Jr. igualó marca de cubanos en MLB
Arizona Diamondbacks (17-16) fue vencido 7×2 por Philadelphia Phillies (19-14). Sin embargo, pese al score adverso que se reflejó, Lourdes Gurriel Jr. logró emular la marca de jonrones que tenía Alexei Ramírez, luego de sacarla del parque en la parte alta del séptimo, para así evitar el blanqueo.
Además de eso, el nativo de Sancti Spíritus enlazó un doblete para irse de 4-2, con par de impulsadas y una anotada. De esta manera, el jardinero llegó a 115 cuadrangulares, ubicándose junto a Ramírez en la posición 16 de todos los tiempos entre cubanos en MLB.
En los últimos siete días, Lourdes Gurriel Jr. batea para .385. Mientras que en la campaña regular registra promedio de .214, con siete dobles, cinco jonrones, 18 empujadas y 11 anotadas en 30 cotejos con la camiseta de Arizona.
Randy Arozarena le ganó duelo a Adolis
Randy Arozarena pudo disfrutar nuevamente de un triunfo de Seattle Mariners (20-12), equipo que se impuso 2×1 ante Texas Rangers (16-18), para afianzarse en la cima de la División Oeste de la Liga Americana.
El nativo de la Mayor de las Antillas marchó de 4-2, con par de sencillos, los cuales le sirvieron para incrementar su average, que ya es de .221, con siete dobles, cinco jonrones, 18 remolcadas y 16 anotadas en 31 compromisos de la actual temporada.
Por su parte, otro de los cubanos en MLB que participó en este cotejo fue Adolis García, quien no logró ayudar como esperaba a Texas, yéndose de 4-0 (.207)
Otras actuaciones de cubanos en MLB
En un duelo de cubanos en MLB, Jorge Soler aportó para que Los Angeles Angels (13-19) derrotaran a la sensación de la temporada, Detroit Tigers (21-13), con marcador de 5×2. Soler (.235) culminó 4-1, con una pisada al plato. A su vez, en los felinos, Andy Ibáñez ingresó como emergente y dio un sencillo en su único turno (.245), además de anotar en una ocasión.
Houston Astros (17-15) sin la presencia de Yordan Alvarez, venció 8×3 a Chicago White Sox (9-24), conjunto en el que Miguel Vargas (.219) terminó de 3-1, con una anotada. Mientras, Luis Robert Jr. (.182) finalizó de 4-0.
Yariel Rodríguez, contó con su primera salida de mayo al trabajar 0.1 entrada en la derrota 5×3 a Toronto Blue Jays (16-17) frente a Cleveland Guardians (19×14). En ese compromiso ponchó al único bateador al que se midió para dejar su efectividad en 5.54.
Ahora, en la temporada regular, el relevista de Camagüey tiene 12 presentaciones, una como abridor. También suma 13.0 entradas lanzadas, con par de holds, 11 ponches y siete boletos, con un promedio al bate de .250 en sus contrarios.
Yandy Diaz (.242) no tuvo fortuna al irse de 3-0 en la victoria 3×2 a Tampa Bay Rays (15-18) sobre New York Yankees (19-14), aunque, se embasó par de veces por boleto.
José Iglesias finalizó de 3-0 en la conquista 2×1 de San Diego Padres (21-11) sobre Pittsburgh Pirates (12-22), por lo que dejó su average en .253.
Cionel Pérez se desempeñó durante 1.1 entradas con Baltimore Orioles (13-19), conjunto que cayó 4×0 a manos de Kansas City Royals (18-16). El lanzador ponchó a un rival, permitió un imparable y negoció un boleto, aunque no le anotaron, para establecer su efectividad en 8.79.
Otro pitcher que vio acción fue Yosver Zulueta (6.75 ERA), quien hizo su debut en la campaña 2025 en el revés 11×6 de Cincinnati Reds (18-16) ante Washington Nationals (15-19). Fue una actuación de 1.1 capítulos, en el que no le dieron un hit, le anotaron una rayita y otorgó una base por bolas.
Andy Pages (.269) no contó con suerte y terminó de 5-0 en la cómoda victoria 10×3 de Los Angeles Dodgers (23-10) contra Atlanta Braves (14-18). En tanto, por los derrotados, Raisel Iglesias (5.25 ERA) trabajó 1.0 entrada perfecta, en la que recetó par de ponches y no dejó que ningún rival se embasara.