Por Swing Completo / contacto@swingcompleto.com
El que crea que el racismo desaparece en el deporte puede aliviarse y hasta desaparecer cuando un atleta alcanza un resultado importante para su país está totalmente equivocado, y muestra de ello ha sido lo acontecido con una de las medallistas en los Juegos Olímpicos de Tokyo 2020.
Este lunes las redes sociales han servido para muchas personas salgan en defensa de la española Ana Peleteiro, después que la ocupante del tercer lugar en la prueba de triple salto haya sido víctima del racismo por intermedio de un titular del diario «El Economista«.
El encabezado del artículo califica a Peleteiro como «medio gallega, medio negra y está atleta por la que suspira toda España está enamorada de un portugués».
La periodista de RTVE y comentarista en los Juegos Olímpicos concluidos en la capital japonesa este domingo, la carismática Paloma del Río, ha publicado un mensaje en su cuenta de Twitter donde reprochó la información del medio de comunicación: «Se habrán quedado a gusto titulando así. Qué despropósito por favor».
Otras figuras conocidas que arremetieron contra el periódico español fueron la actriz española Sara Sálamo quien ha recordado una entrevista en la que hablaba de la importancia que tienen los medios para «poder cambiar las desigualdades».
«Estos días, comentaba en una entrevista, la responsabilidad tan grande que, para mi gusto, tienen los y las periodistas y los medios en general, para poder cambiar las desigualdades. Titulares como este animan al racismo y el machismo», así dijo en un mensaje publicado en su cuenta oficial de Twitter.
Algunos cibernautas han tenido una actitud antirracista y con una crítica total a lo hecho por este diario digital, aunque no han faltado los que han bromeado con la posibilidad de que la triplista entrenada por el multicampeón cubano Iván Pedroso pueda tener la nacionalidad «negra»: «Que alguien me diga que es una broma», señalo uno, mientras otro dijo: «El color del verdadero español no tiene que ver con esa muchacha».
Por su parte también ha habido expresiones contrarias a que se hable de la vida sentimental de Peleteiro. «Es literalmente una atleta olímpica y la clasifican como ‘negra’ y se dedican a hablar de su vida amorosa. De verdad que España deja mucho que desear».
Pese a su multiculturalidad y el vínculo histórico con la raza negra y mestiza, España sigue siendo uno de los países con más racismo de Europa y quizá hasta del mundo. El deporte no ha escapado de situaciones de xenofobia y no solo por intermedio de fanáticos en estadios deportivos. La prensa e individuos que representan instituciones sociales y privadas también han dado muestras en los últimos años que el color de la piel sigue siendo un lastre en la nación ibérica.