Michel Enríquez exige un Salón de la Fama sin censuras: «Son tan cubanos como todos»

José Alberto Portela Aportela

Michel Enríquez puso un dedo en una llaga que muchos se empeñan en ocultar respecto al Salón de la Fama Cubano.

Michel Enriquez en una entrevista y el uniforme del Equipo Cuba

Michel Enríquez es una de los voces más reconocidas en el beisbol cubano, atendiendo al legado que plasmó en los torneos domésticos y con la casaca del equipo nacional. El pinero, salió a la luz pública en la fecha del 1 de diciembre y se refirió a un asunto de importancia para el deporte en la isla. «Súper 12» pidió por la reactivación del Salón de la Fama y exigió que los llamados futuros no estén amparados en ningún tipo de restricciones.

El exatleta conversó con el periodista Daniel Gotay y le comunicó a este que su intención siempre será a favor de la convocatoria que inmortalice a aquellas figuras que impactaron con sus talentos. Pero, Michel Enríquez alzó la voz por una idea en particular.

Según el entrevistado, se deben dejar atrás las diferencias de todo tipo y sumar en las exaltaciones a quienes se lo merezcan, sin importar si viven o no en la Mayor de las Antillas. Solo así se hará justicia con cada uno de los candidatos.

Petición de Michel Enríquez

«Ese tema deben retomarlo porque creo que somos el único país del mundo que no tenemos Salón de la Fama. Si todo el mundo lo tiene: ¿Por qué nosotros no podemos tenerlo?. Y no solo los que están acá, los que están afuera también. ¿Por qué no?. Son tan cubanos como todos. En el mundo entero hay quienes representan a sus países y no viven en ellos, pero cuando los llaman para algún evento o competición van», declaró.

El Salón de la Fama del beisbol cubano se inauguró el 21 de octubre del año 1939, sin embargo, comenzó una etapa de constantes problemas después del 1960, cuando se cerró esta intención por el gobierno de Fidel Castro. El tiempo que transcurrió vivió una serie de intentos por revivirlo, pero resultaron infructuosos. La última «bocanada de aire» surgió en el año 2014 y terminó en la inacción una vez más.

No obstante, Michel Enríquez desea que se retomen las actividades en este sentido, aunque obviamente sabe que es un plan que requiere de un amparo por parte del oficialismo . De otra manera, no podrán salir victoriosos en la encomienda.

«Yo doy mi voto porque se retome ese tema y apoyen a las personas que estén en esa función, porque eso lleva una logística. Que no los dejen solos. Que los apoyen en todo lo que haga falta porque eso va a ser muy importante«, expresó.

El natural de la Isla de la Juventud concluyó su intervención con la defensa de sus colegas del pasado y los de la actualidad, pues cree que es una obligación moral que se contrajo con dichas luminarias.

«Se lo ganaron, nadie se los regaló»

«Esas personas no están presentes físicamente y después van a estar en el Salón de la Fama. Vamos a ponerlos en vida si ellos estaban ahí desde hace años y se lo ganaron, nadie se los regaló. Se lo ganaron con sus esfuerzos en el terreno y en la ciudad y en el barrio donde viven. De ahí sale un Salón de la Fama. No solo del deporte«, finalizó.

Michel Enríquez puso en dedo en una llaga que muchos se empeñan en ocultar. Los atletas que emigraron en la búsqueda de probarse en la mejor liga del mundo están vetados para las autoridades del beisbol cubano. Esta línea de pensamiento es incorrecta y de eso no hay la más mínima duda. El exintegrante de equipos nacionales lo expuso sin tapujos ni máscaras.

Para más información del beisbol cubano haga click aquí

Deja un comentario