Adrián Bonilla
Cuando hablamos de versatilidad, habilidad y adaptación podríamos encontrar como sinónimo al jugador de Los Angeles Dodgers, Mookie Betts.
Durante el juego de este pasado jueves ante Chicago Cubs, en el mítico Wrigley Field, el toletero de 30 años de edad estuvo cubriendo el campo corto de su equipo.
Sin embargo, más allá de eso, a Mookie se le vio cómodo y parecía por momentos ser su posición de todos los días, considerando que no pisaba las paradas cortas desde el año 2012 cuando aun estaba en las menores.
Es así como Mookie Betts dejó una pieza de videoteca ante Chicago cuando en la baja del octavo episodio el equipo local tenía una amenaza ofensiva con hombres en primera y segunda, sin outs en el electrónico y empatados a dos.
El pelotero corrió hacia su mano izquierda, cogió el rolling de bote fuerte, se dirigió a pisar el mismo la intermedia, brincó para evitar el barrido de Cody Bellinger y realizó un tiro certero al mascotín de Freddie Freeman.
Así fue como Mookie despejó las dudas sobre sus capacidades para cubrir el infield después de conocerse que el toletero quería jugar mas en la segunda base en 2023.
Sin embargo, a Betts le llegó una responsabilidad mas ardua tras asumir el shortstop por la lesión del venezolano Miguel Rojas.
El nacido en Nashville, Tennessee, ofensivamente en este 2023 aún no ha brindado su contribución acostumbrada. Mookie batea para .273, dos jonrones y seis carreras producidas en 66 turnos al bate.
A CONTINUACIÓN PUEDES DISFUTAR LA JUGADA MOOKIE BETTS EN EL SHORTSTOP: