En la actualidad poco se toma en dimensión lo que fue Bill Walton durante su mejor etapa en la NBA. Fue dominante tanto a nivel universitario como profesional, en una época en la que era habitual ver a jugadores altos que se hacían fuerte debajo de los tableros.

Muy recordado es su paso por la NCAA con UCLA, lo cual lo llevó a ser elegido en el puesto uno del Draft de 1974 por Portland Trail Blazers. Ahí se mantuvo hasta 1979, donde logró llevar a la franquicia de Oregon al título de la NBA en 1977. Fue una conquista histórica que lo hizo ser una leyenda dentro de la competición.

No obstante, las lesiones llevaron a que su rendimiento bajara y no se sea ese referente que se esperaba que fuese. Pero tuvo una segunda oportunidad para brillar al hacerse espacio en Boston Celtics, junto a Larry Bird, Kevin McHale y compañía. Ahí, ya con varias lesiones acumuladas, pudo ganar el anillo en 1986, el segundo de su carrera.

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Bill Walton fue un referente en la NBA

Por todo este palmarés, Bill Walton significó mucho para la NBA. Su deceso, este lunes 27 de mayo, a los 71 años de edad, tiene consternado al mundo del baloncesto. Desde las organizaciones hasta jugadores, entrenadores y aficionados han recordado a ese pívot de 2.11 metros de estatura que fue MVP de la temporada 1977-78 y lideró dos veces la liga en rebotes. Además de ser par All Star en par de ocasiones.

«Bill Walton fue uno de los jugadores más importantes de su época. Walton, miembro del Salón de la Fama, Jugador Más Valioso y dos veces campeón de la NBA, podía hacerlo todo, poseía una excelente sincronización, una visión completa de la cancha, excelentes fundamentos y era uno de los mejores gran hombre en la historia de la liga. Le encantaba el baloncesto y la música, y apreciaba profundamente sus momentos con compañeros de equipo y amigos», publicó la cuenta oficial de Boston Celtics en X.

La razón de su pérdida física fue un cánc*r que padecía y que fue desarrollándose hasta provocar este desenlace. Una noticia que sin duda ha marcado la tónica en la NBA. Su legado dentro de la competición es significativo y este tipo de mensajes son una muestra de ello, más allá de los números que dejó, los cuales también fueron buenos. Al retirarse en 1988, tenía 13.3 puntos y 10.5 rebotes de media.