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Hablar de Norge Luis Vera en Cuba, en un estrecho marco que relacione al beisbol de la isla, resulta siempre un privilegio. La afirmación pasa a ser valiosa cuando se leen sus números y además de esto, otro pelotero valioso resalta sus logros y condiciones deportivas.
Les hablo específicamente de Henry Urrutia, quien relató en exclusiva para Swing Completo un hecho que lo relacionó con el espigado Norge Luis Vera. Resultó ser un turno al bate de responsabilidad para Urrutia, quien con bases llenas se enfrentó al santiaguero.
Henry Urrutia contó momento difícil frente a Norge Luis Vera
“Las bases estaban llenas y yo apenas tenía unos 22 añitos. Se trataba de un playoffs frente a Santiago de Cuba y la conga no paraba de sonar”, comentó el reconocido pelotero, quien defendía a Las Tunas. Además de esto, reveló que su padre le impuso una presión extra, le pedía batear sí o sí.
“Mi papá me pidió que le hiciera swing a la pelota, le respondí que ni siquiera la veía. Me tiró una recta que no supe por donde pasó”, aseguró entre risas. Además de esto, Henry comentó que su estrategia fue pedir tiempo una y otra vez, pero desde la lomita Norge Luis Vera no dejó de ponerla donde la pedía el receptor. “Fue el turno al bate de más presión durante mi carrera deportiva, ni siquiera en un Caracas-Magallanes, donde rodeaban el estadio en los entre innings de policías anti protestas».
Es válido destacar que Norge Luis Vera nació para ser lanzador estrella, solo bastaría decir que en sus primeras Series Nacionales ya acariciaba sin problemas la barrera de las 95 MPH. Además, se formó como un serpentinero de momentos cruciales, circunstancias difíciles del juego donde la salida era bien estrecha desde el box.
La actuación del santiaguero ese día fue tan memorable que Henry Urrutia no olvida la estadística: “Vera ese día nos lanzó nueve innings con apenas 76 pitcheos, en playoffs, para que tengas una idea”, sentenció.
Números de Norge Luis Vera tras su paso por el beisbol cubano
Se considera uno de los 10 mejores pitchers que pasaron por los torneos domésticos en Cuba. Así lo validan varios especialistas con solo repasar sus números históricos. Con un debut en el año 1995, Vera jugó 17 series y defendió a las Avispas de Santiago de Cuba. Lanzó 319 juegos y logró un balance positivo de 176 victorias y 68 derrotas, mientras que se anotó además cinco juegos salvados.
En 6175 entradas, le estamparon un average oponente de .248, mientras que su promedio de carreras limpias descansó en 2.69. Propinó a su vez 1271 ponches y regaló 463 bases por bolas, 33 de ellas de forma intencional. Su nombre y su legado perduran en los aficionados que disfrutaron de su talento. Un hombre que llegó a ser el mejor de su tiempo en Cuba, mientras se enfrentaba a bateadores de renombre.
Licenciado en Español-Literatura, Profesor y Cronista Deportivo
Atleta de alto rendimiento en atletismo y cronista deportivo. Autor de cuatro cuentos publicados y colaborador en diversos medios de comunicación. Desde 2021, miembro del grupo de escritores y expertos de Swing Completo.
Para mi ese lanzador santiaguero sin tanta zarandeo, o zangoroteo mediático mucho mejor picher que el controvertido victoreado Pedro Luis Lazo. Así como era callado ‘mataba’ literalmente sin tanta euforia a todo bateador que e frentaba con renombre o sin renombre. Una recta lisa como un «hilo estirado» con unas rpm que se veía que eran de 2700 pa arriba y que por eso los bateadores no podían adivinarle las costias. Máas una slider que era un cuchillo; recta al principio y cuando llegaba solo a un metro del bateador era que rompía ligeramente. Y ni hablar su curva rápida que la usaba para sorprender. Vera si hubiera vivido la epoca actual era un Grandes Ligas seguro al garete y si no firmaba con un club de MLB de seguro terminaba como Moinelo firmado como estrella de un Club NPB.