NUEVO HIMNO en New York: Edwin Díaz y Timmy Trumpet MONTARON SHOW ante Dodgers en Citi Field

Por Jesús Pérez Vichot (Chuchi)

Ya se ha hecho habitual que cada vez que el equipo de los Mets llega a la última entrada con el marcador a su favor, el estelar cerrador boricua Edwin Díaz y el reconocido artista Timmy Trumpet sean protagonistas de un verdadero espectáculo en el estadio Citi Field de New York. Desde los aficionados presentes hasta los que siguen el encuentro de sus hogares están pendientes del mejor momento del juego, la aparición de «Sugar» desde los jardines hasta llegar al montículo.

Este miércoles el cerrador derecho volvió a salvar otro encuentro para el conjunto neoyorquino. Esta vez fue el número 29 de la campaña para él mientras los Meta vencían a los Dodgers 2×1. Díaz lanzó una entrada y abanicó a un rival. Ahora su efectividad es de 1.38, mientras permite 5.33 hits y poncha a 17.20 bateadores por cada nueve innings lanzados. Está es la tasa de ponches más elevada de un relevista al cabo de 45 apariciones en la historia de las Grandes Ligas…. ¡Fabuloso!

De esta forma se le dio la bienvenida al lanzador más esperado del juego. Timmy junto al Señor y la Señora Met (mascotas del equipo local) tocaron las trompetas durante dos minutos aproximadamente mientras los presentes bailaban y con botellas vacías simulaban los movimientos de las mascotas.

Es un momento muy emotivo y una canción que se ha convertido en un himno para la afición de Queen. El instante en que Díaz sale trotanto rumbo al montículo nos hace recordar la famosa película “Major League”, cuando Ricky “Wild Thing” Vaughn, enloquecía a los aficionados con su presencia. Solo que en el caso de Edwin es real, algo sin precedentes en la casa de los Mets.

Díaz logró tres importantes rescates en la serie anterior contra los Braves y la canción se hizo viral. Años atrás el pitcher de 28 años de edad ya había usado esta canción cuando lanzaba para los Marineros, pero no tuvo el éxito de ahora. Su control ha mejorado muchísimo, con una rectas que oscilan las 100 mph y sliders de 91-93 mph, se ha convertido en uno de los cerradores más dominantes del béisbol.

Si sus magistrales actuaciones van acompañadas de una música tan pegajosa, hacen el complemento perfecto para disfrutar de este maravilloso deporte.

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